Su nombre refleja el duro episodio que vivió, pero también pone de manifiesto su dureza y lucha por seguir adelante. 'Stone', un perro de poco más de cinco años, fue hallado enterrado bajo piedras y casi moribundo el pasado 21 de julio en Chan da Lagoa, Baiona, por un vecino que transitaba por la zona, cuyas mascotas alertaron de los quejidos del animal. Cuando llegó a manos de la protectora "Bai Sen Pulgas" su estado era muy malo, estaba "inconsciente" y "muy muy malito", recuerdan desde el centro. Presentaba un fuerte golpe en la cabeza que le dejó seriamente afectado el cráneo. Desde un primer momento, la protectora descartó que se tratase de un atropello, por lo que puso el caso en conocimiento de la Guardia Civil. Ahora es el Instituto Armado el que ha decidido investigar al dueño del cánido como supuesto autor de las graves lesiones que sufrió. Fuentes de las Guardia Civil relataron que esta persona se informó sobre la eutanasia de su perro alegando que había mordido a varios familiares.

"Stone" se recupera ahora gracias a los cuidados que recibe de la protectora y veterinarios que lo atendieron, además de las donaciones de cientos de personas que se volcaron con su historia. "Conseguimos el dinero para su tratamiento gracias a la solidaridad de la gente. El TAC que se le realizó confirmó que no sufría esquirlas en el cráneo pero sí una inflamación por lo que estuvo ingresado varios días. Ahora va mejorando, ya empieza a comer solo y da mini carreras. Está en una casa de acogida y tiene programadas visitas periódicas", relatan desde Bai Sen Pulgas, añadiendo que, a pesar de los cuidados y su mejoría, podrían quedarle algunas secuelas.