Golpe a la inmigración ilegal en Vigo. Agentes de la Policía Nacional detuvieron a un hombre de 31 años de edad e imputaron a otro de 40 años, de nacionalidad pakistaní y con domicilio en la ciudad olívica, por los delitos de favorecimiento de la inmigración ilegal, estafa y contra los derechos de los trabajos.

La investigación llevaba a cabo por la Comisaría de Vigo-Redondela se inició el 4 de enero cuando un hombre de nacionalidad extranjera se presentó en dependencias policiales para denunciar que había efectuado un pago de 9.300 euros a un pakistaní para que le consiguiera un permiso de residencia en España.

Los agentes encargados del caso indagaron y descubrieron que en el año 2014 cuando la víctima residía y trabajaba en París, fue contactado por dos hermanos pakistaníes a los que conocía de la infancia. Estos se ofrecieron a tramitarle la documentación para regularizar su situación en España, bien a través de un contrato laboral o mediante el concierto de una pareja de hecho, pidiéndole a cambio 8.000 euros para gastos.

Tras aceptar la propuesta en mayo de 2014, viajó a Vigo para empadronarse y abonar la primera de las cuotas de 1.300 euros, regresando posteriormente de nuevo a París. No sería hasta mediados del pasado año cuando ya se instaló definitivamente en la ciudad viguesa para trabajar como camarero y ayudante de cocina en varios establecimientos de hostelería que estos dos hermanos regentaban tanto en Vigo como en Sanxenxo.

En el mes de septiembre de 2015, la cantidad solicitada en un comienzo de 8.000 euros se incrementaba cada vez más con distintas disculpas que la iban encareciendo, llegando la víctima a abonarles ya en esas fechas unos 9.300 euros en concepto de gastos para regularizar su situación.

Como la víctima empezaba a impacientarse y para calmar sus reclamaciones, uno de los hermanos le presentó a una mujer española que le dijo que sería la pareja con la que se casaría para regularizar su situación, si bien finalmente el matrimonio nunca llegó a formalizarse.

A finales de 2015, a los 9.300 euros entregados por la víctima en metálicos a los hermanos en diferentes pagos, se suma y se agrava la situación de estar trabajando más de medio año en los locales de hostelería de Vigo y Sanxenxo sin percibir cantidad alguna por el trabajo que realizaba.

Viendo que los papeles prometidos no llegaban, les solicitó que le devolvieran el dinero que les había entregado, negándose a ello los dos hermanos y amenazándolo con que lo denunciarían a las autoridades españoles y que lo meterían en la cárcel por su condición de ilegal, situación que desbordó completamente a la víctima que asumiendo los riegos prefirió poner término a esta situación denunciando su caso a la policía.