En torno a las 16.30 horas, el cerquero Colomba Tercero llegó al puerto del Berbés. A bordo llevaba consigo restos de la embarcación Látigo, los únicos que se pudieron recoger junto a los que ya había traído la embarcación de la Xunta Paio Gómez Charino. Allí se encontraba Julio Alonso, expatrón mayor de la cofradía San Francisco de Vigo y padre de uno de los dos desaparecidos que viajaban en la lancha, Francisco Borja, que pudo atender a FARO durante unos breves minutos. "Mi hijo, que en marzo cumpliría 34 años, lleva toda la vida en el mar, primero conmigo y ahora por su cuenta. Es de los mejores percebeiros de toda la Ría de Vigo", indicó afectado Alonso.

Comprobando in situ lo poco que el amplio dispositivo había encontrado de la embarcación al sur de las Cíes, informó que su hijo formaba parte de la junta general de la cofradía pero que no ostentaba ningún cargo, como sí había hecho él hasta las elecciones que tuvieron lugar en 2014. De igual forma, explicó como fue el día de ayer para él. "Borja salió a pescar a las ocho de la mañana, como solemos hacer. Sobre las seis le llamé, para saber cómo estaba yendo todo. Me dijo que iban a volver. Se ve que el último lance fue el que no salió bien", comentó Alonso.

Preguntado por el estado del mar en el momento en el hablaron por teléfono, el expatrón mayor indicó que era "malo", pero añadió que "esto es lo de siempre". "Somos pescadores y tenemos que salir porque es nuestro trabajo. Así hacemos todos", lamentó. De hecho, al ver que el móvil de ninguno de los dos daba señal decidió salir a buscarlos pese a las inclemencias del mar, muy revuelto.

Ayer, en el momento en que descargaban los restos sobre las 17.00 horas, Alonso dijo que lo único que habían podido encontrar eran los restos del barco. "Sabemos que se hundió y poco más podemos hacer", matizó. En este sentido, como es lógico, incidió que ahora ya da igual todo lo material: "Lo único que ahora nos preocupa es que aparezcan ellos, lo demás nos da todo igual". Junto a él, tanto el viernes como ayer, estaba su hermano, que, en las pocas palabras que dedicó a los medios en nombre de Alonso, quiso dejar claro lo afectada que se encontraba la familia en estos momentos tan duros y la necesidad de espacio para digerir la tragedia.