La titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Cangas dictó ayer auto de prisión preventiva sin fianza para Jesús Rodríguez Cruz, "Briso", el moañés de 54 años que supuestamente mató en la madrugada del sábado en un tiroteo a Moisés González e hirió a Fernando Moreira, ambos de Domaio. El fiscal le atribuye un presunto delito de asesinato, otro de tentativa de asesinato y también tenencia ilícita de arma corta, lo que sorprende a la defensa, que basará su estrategia en que la imputación sea por homicidio, al sostener que no hubo premeditación ni alevosía, ya que presuntamente fueron el muerto y el herido los que acudieron a su casa. Al pie del fallecido había un cuchillo (un arma blanca de caza), un pasamontañas y guantes.

Según pudo averiguar FARO, Jesús Rodríguez no quiso declarar ante la Guardia Civil, aunque ayer sí lo hizo en el juzgado. Tras ser interrogado, fue introducido en un furgón policial y enviado a la cárcel de A Lama. El imputado mantiene que no conocía de nada al fallecido ni tampoco al herido. Hasta el juzgado se desplazaron tres amigos del detenido, que negaban que fuera un asesino, "que no mata por matar" y que insisten en que le tuvieron que amenazar. Sigue sin quedar claro si su entrega ante la Guardia Civil a su regreso de tomar café lleva implícito un reconocimiento de los hechos o si actuó en defensa propia al verse amenazado.

Los primeros resultados de la autopsia señalan que la víctima, de 41 años, falleció de dos disparos, ambos en el tórax y que quedaron alojados en los pulmones. También detecta que hay un disparo con trayectoria diagonal que podría suponer que Moisés González fue rematado cuando estaba ya abatido. Pero, de momento, no es concluyente. La Guardia Civil supone que el fallecido había bebido, ya que su cuerpo olía a alcohol. Fuentes judiciales manifestaron también ayer que el herido, Fernando Moreira, que sigue hospitalizado en Vigo recuperándose de la herida en una nalga que sufrió en el tiroteo, podría ser detenido cuando salga del hospital.

Esta hipótesis contrasta con el hecho de que el hombre no está incomunicado, y de hecho respondió de nuevo ayer telefónicamente a FARO desde la habitación del centro sanitario vigués donde permanece ingresado. Respecto a las sospechas sobre que habría una tercera persona que acudió con ellos dos a la casa de "Briso", lo niega y asegura que tras resultar herido él mismo condujo el coche hasta el cuartel de Moaña, en donde ayer el vehículo permanecía precintado delante de la fachada. Moreira rechazó realizar más declaraciones.

No trascendió si apareció el revólver que los buzos de la Guardia Civil buscaron rastreando el fondo del muelle de O Con. Mientras tanto todo son especulaciones sobre lo que hizo Jesús Rodríguez durante las ocho horas que transcurrieron desde el tiroteo hasta que se entregó. Además de ir a una churrería a desayunar, se especula con que llegó a estar en un local de ocio con unos amigos e incluso con que uno de ellos podría tener escondida el arma.