Un triste récord en atropellos mortales. El mes de enero que está a punto de concluir ha disparado la cifra de peatones fallecidos en las carreteras gallegas. El goteo de siniestros con consecuencias trágicas ha sido constante. Y el último caso se registraba ayer mismo en la localidad coruñesa de Ortigueira, elevando a once el número de arrollamientos mortales desde que comenzó el año 2012. De esta manera, las víctimas de atropellos en Galicia en este período de solo 29 días suponen ya más de la mitad de las registradas en todo 2011, cuando la cifra fue de veinte.

El siniestro de Ortigueira sucedió ayer al mediodía. La víctima fue un hombre de 81 años que fue arrollado en la carretera AC-862, según informó la Guardia Civil de Tráfico de A Coruña, que investiga las causas de este suceso. El resto de accidentes por atropellos registrados en la comunidad este enero ocurrieron en carreteras de las cuatro provincias gallegas y la edad de las víctimas oscila entre los 39 y los 83 años de edad.

La provincia pontevedresa es la que más casos suma, un total de cuatro. Dos de los arrollamientos ocurrieron en la ciudad olívica. En uno la víctima fue un hombre de 39 años que fue arrollado por un camión en la autopista AP-9. Y el pasado jueves, una octogenaria fallecía en el hospital poco después de ser golpeada por un autobús de Vitrasa en la avenida de Ramón Nieto. Los otros siniestros mortales en la provincia de Pontevedra ocurrieron en Lalín –un hombre de 70 años fue atropellado cuando volvía de un entierro– y en Moaña, donde la víctima fue un hombre de 49 años que acababa de bajarse del autobús a escasos metros de su domicilio.

En la provincia de A Coruña, los atropellos se cobraron tres vidas. Una de ellas fue la del anciano muerto ayer en Ortigueira. Los otros casos sucedieron en Ordes, donde murió una peatón de 57 años, y en Ares, localidad en la que la víctima fue un septuagenario que resultó alcanzado por la pata extensible de un tráiler. En Lugo, las dos víctimas de este enero murieron en el mismo siniestro: se trata de dos hombres de 54 y 56 años que fueron arrollados por un camión en Meira. La provincia de Ourense también sumó dos fallecidos en siniestros en Maceda –falleció un peatón de 78 años– y en Pereiro de Aguiar –la víctima tenía 73 años–.

La sucesión de arrollamientos mortales ya llevaba hace unos días al jefe de la Guardia Civil de Tráfico de Galicia a calificar este enero como un mes "negro". Por este motivo, José Hermida anunció que gran parte de las labores de prevención que se harán este año se centrará en los peatones. ¿Las causas de tantos siniestros? A juicio de este mando, la tasa de atropellos en invierno en las carreteras gallegas es elevada por varios factores: los días son "más cortos", las condiciones climatológicas más adversas y los peatones, en su mayoría, siguen sin usar prendas reflectantes, una medida que considera indispensable, ya que la mayoría de estos accidentes de circulación se produce de noche.

Lo ocurrido este enero confirma que una de las lacras de la accidentalidad en las vías gallegas son los atropellos. Ya el pasado noviembre Tráfico puso en marcha una campaña para concienciar a los viandantes del rural de la necesidad de usar dispositivos reflectantes y se comenzaron a tramitar las primeras sanciones por no utilizar estas prendas (80 euros de multa).