Dos peatones muertos en apenas 24 horas en sendos accidentes de tráfico en A Guarda y la localidad coruñesa de Cerceda. En ambos casos fueron arrollados prácticamente delante de su casa y los servicios médicos no pudieron hacer nada por salvarles la vida.

Un carpintero jubilado de A Guarda, de más de 80 años de edad, falleció ayer sobre las 13.30 horas en la villa guardesa a consecuencia de las lesiones sufridas, principalmente en la cabeza, al ser atropellado por una furgoneta conducida por un vecino de O Rosal, cuando atravesaba una calle.

El accidente ocurrió en la Avenida Donantes de Sangre de la localidad, a escasos veinte metros del domicilio del fallecido, cuando éste cruzaba cerca de un paso de peatones o por el mismo, aspecto que ayer trataba de esclarecer la Policía Local de A Guarda que acudió al lugar del siniestro.

El conductor, vecino de O Rosal, tiene unos 50 años de edad y circulaba en ese momento con su furgoneta Citroën Berlingo por la Avenida, en dirección a Baiona, transportando flores, cuando por causas que ayer todavía se desconocían, atropelló al anciano, muy conocido en la localidad. La Policía Local procedió a realizar las pruebas de alcoholemia al conductor, que dieron negativo.

El herido fue atendido en el mismo lugar del siniestro por médicos del centro de salud de A Guarda, que intentaron reanimarlo sin conseguirlo. Los facultativos del servicio 061 fueron quienes certificaron su muerte. El titular del Juzgado de Tui que se encontraba de guardia autorizó el levantamiento del cuerpo para ser trasladado por Emorvisa hasta el Hospital Nicolás Peña de Vigo, donde se le practicará la autopsia.

La otra víctima mortal es una mujer de 72 años de edad que falleció tras ser atropellada en la noche del jueves por un turismo en una pista en el término municipal de Cerceda (A Coruña). Según ha informado la Guardia Civil de Tráfico, el atropello tuvo lugar sobre las 21.30 horas en el kilómetro 5 de una pista asfaltada en Cerceda.

Fue un turismo modelo Volkswagen Golf el que arrolló a la mujer, que ha sido identificada como S.V.P., de 72 años de edad,. La víctima mortal regresaba con su consuegra de pasar la tarde en el centro de Tercera Edad y se despidieron a pocos metros de su casa, donde tuvo lugar el atropello. La mujer cruzó la pista con climatología adversa, ya que había niebla densa, y no llevaba ninguna prenda reflectante, según la Guardia Civil.