La juez del Juzgado de Instrucción número tres de Ponteareas, Almudena Martínez Sáncez, decretó ayer el ingreso en prisión de José Ángel Martíns Mendoza, implicado en la muerte del guardia civil Jorge Piñeiro Lorenzo, el martes, cuando pretendían asaltar la oficina de Caixa Galicia en A Cañiza con el método del butrón.

La juez, que decretó el secreto de sumario, imputa a Martíns Mendoza un supuesto delito de homicidio consumado, al igual que al otro implicado, José Vilar Casal, a quien tomó declaración en el Hospital de Montecelo, desde el que lo envió directamente a la prisión de A Lama. Además le atribuye supuestos delitos de tenencia ilícita de armas, atentado a agente de la autoridad y tentativa de robo, según fuentes cercanas al caso.

Martíns Mendoza, de 35 años. llegó al juzgado de Ponteareas pocos minutos antes de las 11.00 horas de la mañana en furgón de la Guardia Civil, con vaqueros, zapatillas de casa y una camisa. El furgón entró en un pequeño foso que da acceso a un sótano y a los calabozos; tras abrirse la puerta salió con la cara descubierta y miró desafiante a cada uno de los fotógrafos y cámaras de televisión que estaban en el lugar, posteriormente fue trasladado a los calabazos hasta la hora de la declaración.

El detenido prestó declaración asistido por una abogada de oficio desde las 13.30 horas aproximadamente hasta las 17.30 horas y salió del Juzgado con dirección a la cárcel de A Lama a las 17.45 horas en otro furgón policial.

José Angel Martíns Mendoza, conocido con el alias del "El Peke" fue detenido el martes, a las 18,00 horas, en el lugar de A Bugariña (Covelo), después de haber huido de A Cañiza tras el incidente que remató con la vida del agente de la Guardia Civil.

Durante los hechos, otro guardia del puesto del puesto de Covelo, que resultó herido leve, había logrado detener a José Vilar Casal, que se confesó autor material de los disparos mortales.

La detención de Martins Mendoza fue posible tras un gran despliegue de la Guardia Civil y la colaboración ciudadana. Sin embargo los agentes no pudieron dar con el coche en el que había huido ni con sus supuestos cómplices. Tras la detención se realizó un rastreo por toda la zona usando helicópteros de vuelo muy bajo que revisaron pistas forestales, montes y fincas en un radio de unos diez kilómetros.

Secreto sumarial

Fuentes policiales indicaron que el secreto de sumario se ha decretado debido a la complejidad del caso y la posible implicación de otros delincuentes, dos de ellos buscados en las últimas horas sin resultado por la Guardia civil y la Policía.

Durante la visita a Galicia, con motivo del entierro de Jorge Piñeiro, el director general de la Policía y Guardia Civil dio instrucciones exactas a sus mandos de cruzar todos los datos existentes y investigar con coordinación absoluta a esta banda que podría estar relacionada con numerosos robos e intentos de robo en los últimos meses.