Los organizadores de la pelea de gallos que supuestamente se celebró el sábado en un galpón de Redondela en el que irrumpió la Policía se enfrentarán a penas de multa o de trabajos en beneficio de la comunidad. Los responsables de esta actividad ilegal ya habrían sido identificados y, aunque no trascendió si fueron imputados, todo apunta a que deberán responder ante la Justicia por la presunta comisión de una falta que se recoge en el artículo 632 del Código Penal y que castiga con sanciones económicas de 20 a 60 días o con entre 20 y 30 días de trabajos sociales a quienes "maltrataren cruelmente a los animales domésticos o a cualesquiera otros en espectáculos no autorizados legalmente". Una sentencia reciente por un caso similar ocurrido en Asturias se saldó con multa de 240 euros para cada condenado.
Operaciones policiales contra combates clandestinos de gallos como el detectado este pasado fin de semana en la parroquia redondelana de Saxamonde son totalmente excepcionales en Galicia. Uno de los pocos precedentes se remonta a 2008, cuando la Policía desmanteló en Ferrol un grupo que supuestamente se dedicaba a estas peleas. Algunos de los responsables alegaron entonces que la actividad era legal y que lo que organizaban eran topas [combates] "con protección" con el objetivo de seleccionar las mejores aves y las más fieras de la raza combatiente española.
No trascendió si esta alegación se hizo también en el caso de Redondela, pero en contra de sus organizadores juega el hecho de que había un espectáculo no autorizado –al combate acudieron unas 40 personas que estaban consumiendo y el lugar estaba acondicionado con una especie de ring y sillas– y también que los agentes del operativo dirigido por la Policía Autonómica se incautaron en el galpón de espolones artificiales que se suelen usar para que el ave hiera al oponente. Los efectivos policiales también se aprehendieron de productos sanitarios que presuntamente se utilizarían para las heridas de las aves, que al parecer pertenecían a la raza de gallos de pelea.
La actividad llevada a cabo en el galpón de Saxamonde fue ayer criticada por la asociación gallega de defensa de animales "Matar por matar NON", cuyo presidente, Julio Fernández, afirmó que que nunca recibieron denuncias sobre combates de gallos en la comunidad. "Pero esta operación policial demuestra que se hacen de forma clandestina", afirma. "El problema de estas actividades es que apenas se persiguen y tampoco hay concienciación ciudadana; la sociedad debe demandar que los animales sean tratados dignamente", concluye.
