Dos años de prisión. Ésta es la pena que aceptó ayer un vecino del municipio pontevedrés de Redondela por apropiarse de unos 20.000 euros de la empresa de la que era empleado. La firma tenía su sede en Jaén, pero el condenado, que trabajaba como comisionista, se dedicaba exclusivamente a la zona de Galicia.
La conformidad del acusado con la condena evitó la celebración del juicio que estaba previsto para ayer en la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo. El redondelano admitió la autoría del delito de apropiación indebida del que lo acusaba la Fiscalía y por el cual, tras un acuerdo entre las partes, aceptó los dos años de cárcel, una pena que, si carece de antecedentes judiciales, no supondría su ingreso efectivo en prisión.
Los hechos ocurrieron a lo largo de varios meses, concretamente entre enero y julio de 2007. El hombre estaba dedicado a la zona de Galicia y, según el ministerio público, conseguía el dinero de forma ilícita por medio de dos procedimientos: o bien no reintegraba las cantidades que recibía tras suministrar material a otras empresas o se apropiaba de la mercancía para posteriormente venderla por su cuenta para quedarse así con el dinero.
Por otra parte, la Sección Quinta acogerá hoy por la mañana un juicio por una presunta falsificación de una firma y en el que denunciante y denunciado son una ex pareja sentimental. El fiscal no ejercerá la acusación.
