María Pilar Blasco, la empresaria de Sabiñánigo que apareció muerta en un canal próximo a esta localidad oscense, pudo ser arrojada viva al mismo para que se ahogara. Será la autopsia la que disipe esta duda ya que la empresaria apareció maniatada y amordazada. La Guardia Civil tiene abiertas varias líneas de investigación sobre su secuestro y muerte.