Una mujer de unos 60 años murió ayer en Granada y su marido, de 70 años, resultó herido grave tras ser apuñalados en el inmueble del edificio donde residían. El hijo de una vecina, con la que discutieron en el ascensor, ha sido detenido como presunto agresor .

Los testigos explicaron que en el momento de la detención, que se llevó a cabo en el mismo barrio, el joven negó haber apuñalado a la pareja y sólo reconoció que había discutido con ellos.

Las dos víctimas, según una vecina, eran padres de Encarnación Rubio, que falleció el pasado mayo en la localidad de Cúllar-Vega (Granada) al ser atropellada varias veces por su marido. El suceso de violencia familiar causó entonces gran conmoción a nivel nacional.

La mujer asesinada ayer, Encarnación Molinero, recibió una puñalada en el hemitórax izquierdo que le causó una hemorragia que le produjo la muerte, y su marido, P.R.O. resultó herido en el abdomen.

Estos no fueron los únicos crímenes perpetrados con arma blanca a nivel estatal. En Valencia un joven falleció de madrugada por arma blanca en las fiestas de Llutxent (hay un detenido) y en Gran Canaria otro murió por un profundo corte en el cuello con un vaso roto durante una pelea en los chiringuitos de Agaete.

Un ciudadanos marroquí fue detenido por la Guardia Civil en Lanzarote acusado de la muerte de un turista inglés, al que supuestamente asestó varias cuchilladas en el transcurso de una reyerta ocurrida el miércoles en un local de copas de un centro comercial.

En otro orden de cosas, un hombre se entregó ayer por la mañana en Platja d´Aro en Girona y confesó que había disparado tres tiros contra un turista, herido grave, en el transcurso de una discusión entre ambos por cuestiones sentimentales.