Cartagena y Lorca revisan la seguridad de sus zonas de ocio

La tragedia vivida la madrugada del pasado domingo por el incendio de las discotecas Teatre y La Fonda de Atalayas en Murcia, con un balance de 13 fallecidos, ha dado la voz de alarma en torno a los locales de ocio nocturno no solo de la capital, sino de todas las ciudades. Es el caso de Cartagena y Lorca, que han puesto en marcha medidas para supervisar la seguridad de sus zonas de ocio y, sobre todo, para el control de las licencias de actividad.Así, por parte de la ciudad portuaria, su alcaldesa Noelia Arroyo ha pedido información a la concejalía de Urbanismo, que es quien otorga las licencias y quien también hace el seguimiento con inspecciones de todos los planes de seguridad, de emergencias y contra incendios, que tienen que tener aquellos locales que tienen permiso para una actividad similar a la de los negocios siniestrados. "Vamos a ver las conclusiones de la investigación de Murcia y qué falló", ha afirmado Arroyo, quien ha añadido que "una vez que sepamos todo, aplicaremos esas conclusiones a nuestra manera de funcionar en el Ayuntamiento".

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Según fuentes municipales, la Concejalía no tiene constancia de que exista ninguna orden de cierre sobre negocios de este tipo por el incumplimiento de la normativa.

Por su parte, el alcalde de Lorca, Fulgencio Gil, ha anunciado que el Consistorio creará una unidad "multidisciplinar" para reforzar las inspecciones a locales de ocio tanto del casco urbano como de las pedanías.

El anuncio viene a confirmar la propuesta expresada por Gil durante su discurso de investidura pronunciado hace escasos meses tras las últimas elecciones municipales.

En concreto, el primer edil lorquino ha indicado que la unidad, que contará con representación del cuerpo de Policía Local y de técnicos pertenecientes a la concejalía de Urbanismo, "entre otros servicios municipales", controlará "determinadas actividades" a lo largo y ancho del municipio de Lorca.

Gil ha destacado la "acumulación de bombonas de butano en balcones" o los "locales de especiales características como los de apuestas", como elementos a los que la unidad prestará especial atención. Del mismo modo, según el regidor, se llevará un control "exhaustivo" de locales con características similares a los que fueron pasto de las llamas en la capital murciana. "No tenemos constancia de que existan locales de este tipo en el casco urbano, pero sabemos que en el extrarradio hay algunos y vamos a velar por que los servicios municipales cumplan su trabajo y realicen todos los controles e inspecciones pertinentes para su correcto funcionamiento", ha finalizado el alcalde.