Ciencia

Investigadores de Cambridge y Asturias desarrollan una prueba que identifica con 10 años de antelación el riesgo de sufrir un cáncer en la sangre

Pedro Moral Quirós, del Instituto de Investigación Sanitaria del Principado, y Clea Bárcena, de la Universidad de Oviedo, han participado en la creación de una aplicación predictiva

Clea Bárcena y Pedro Quirós.

Clea Bárcena y Pedro Quirós. / UNIVERSIDAD DE OVIEDO

A. Rubiera

Un equipo de investigadores de la Universidad de Cambridge, en concreto del Cambridge Stem Cell Institute (CSCI) y del Instituto de Investigación Sanitaria del Principado de Asturias (ISPA) han colaborado para desarrollar una nueva prueba que permitirá que algunas personas conozcan con años de antelación su riesgo de sufrir leucemia mieloide aguda y otros tumores en la sangre.

Para ello han creado una aplicación, MN-predict, que "esperamos que ayude a los médicos a identificar a las personas en riesgo de sufrir cánceres mieloides y a utilizar tratameintos novedosos para prevenir su desarrollo", tal como ha indicado Muxin Gu, primer autor del trabajo que hoy mismo ha salido publicado en la revista Nature Genetics. En el grupo de trabajo han participado también como co-firmante, Pedro Moral Quirós, investigador del FINBA-ISPA, y la doctora Clea Bárcena, de la Universidad de Oviedo.

Pedro Moral Quirós asegura que la predicción de riesgos de enfermedades con muchos años de antelación "es un camino que se está iniciando y que va a dar mucho de sí. Podría decirse que es el presente y futuro" de la medicina.

Las neoplasias mieloides son, según explican los expertos, un grupo de enfermedades que incluyen la leucemia mieloide aguda, los síndromes mielodisplásicos y las neoplasias mieloproliferativas. Estos cánceres, que se desarrollan en la médula ósea y en la sangre, se caracterizan por la producción de células sanguíneas anormales. "A pesar de algunos avances recientes en su tratamiento, estos cánceres siguen siendo mortales para muchos pacientes”, indica Quirós.

El trabajo parte de las investigaciones previas que recientemente determinaron que estos tumores se desarrollan durante décadas a través de la acumulación de mutaciones en el ADN de células madre, las cuales son las responsables de la maduración de las células sanguíneas sanas. Mutaciones que hacen que las células madre crezcan más rápido de lo normal y, a medida que se acumulan más mutaciones, pueden progresar hacia una leucemia.

Pese a que las mutaciones que promueven este crecimiento celular son relativamente comunes, afortunadamente los casos en que finalmente se desarrolla una leucemia son minoría. Es en estos casos donde una identificación temprana del riesgo puede ser determinante a la hora de prevenir que se desarrolle el cáncer.

La investigación y el desarrollo que ahora se da a conocer ha partido del análisis de datos de más de 400.000 personas cuya información está recogida en el Biobanco del Reino Unido. Gracia a ella este grupo de expertos ha desarrollado MN-predict, una plataforma que utiliza datos limitados de secuenciación de ADN y análisis básicos de sangre, por lo que "esta herramienta podría utilizarse en clínicas especializadas en prevención de leucemia", sostienen los investigadores.

"Todos sabemos que la prevención es mejor que la cura, pero no es fácil prevenir enfermedades como la leucemia sin saber quiénes están en riesgo”, comenta George Vassiliou, responsable junto a Moral Quirós del estudio. Por ello, espera que esta plataforma pueda convertirse en “una parte esencial de los futuros programas de prevención de la leucemia”. El investigador asturiano resalta la importancia de avanzar en este ámbito “en lugar de tratar la enfermedad en su forma más avanzada”.

La investigación y el desarrollo de MN-Predict fueron financiados por Cancer Research UK y la Leukaemia and Lymphoma Society. También participaron en el estudio científicos del Early Cancer Institute, Universidad de Cambridge, Universidad de Bristol, Universidad de Oviedo (España), Universidad de York, AstraZeneca (Reino Unido), Centro Alemán de Investigación del Cáncer (DKFZ, Alemania), Hospital St. James's de Leeds y Universidad de Pavia (Italia).