El cambio de hora, de nuevo a debate

Un grupo de especialistas plantea al Consejo de la Unión Europea un plan de transición para que España adopte definitivamente el horario de invierno

El cambio de hora, de nuevo a debate

El cambio de hora, de nuevo a debate / Montse Baraza

Montse Baraza

Quedan apenas unos días para que España y otros países europeos procedan al cambio de hora para pasar del horario de verano al de invierno. Coincidiendo con este momento, un grupo de expertos quiere que el Consejo de la Unión Europea recupere y ejecute el proyecto de acabar con el cambio de hora, algo a lo que la Comisión Europea y el Parlamento Europeo ya se comprometieron en 2019 pero que la irrupción de la pandemia dejó apartado de la agenda de los gobiernos. Para reactivar el proyecto y facilitar su puesta en marcha, un grupo de expertos ha elaborado un plan de transición para acabar con los cambios de hora y establecer zonas horarias naturales de forma permanente en Europa. La propuesta la presentarán oficialmente este lunes en el marco de la conferencia Barcelona Use of Time Week, que reflexiona sobre el uso del tiempo y la reforma horaria.

La idea es que cada país adopte durante todo el año la hora que le corresponde según el mapa de 24 franjas horarias en las que está dividida el planeta. Esa es la que se considera la “hora natural” o “hora solar” de cada país. Y, para dejarlo claro en el vocabulario a pie de calle, se trata de quedarnos con lo que llamamos horario de invierno. Para hacerlo, los expertos proponen un plan de dos pasos.

En una primera fase, todos los países de la UE eliminarían el cambio de hora en primavera y mantendrían la hora que usan en invierno. Aquellos países cuya zona horaria recomendada ya sea su hora estándar actual, no necesitarán realizar más pasos.

En una segunda fase, aquellos países en los que, tras ejecutar la primera fase, su zona horaria recomendada aún no sea su hora estándar (caso de España, Portugal, Bélgica, Francia, Grecia, Irlanda, Luxemburgo y Países Bajos), retrocederán sus relojes por última vez en otoño, para poder adoptar su zona horaria recomendada como nueva hora estándar.

En términos de salud, los expertos subrayan que el desfase y desalineación de los relojes internos aumenta la privación de sueño y el llamado jetlag social en la mayoría de la población, lo cual se asocia con efectos negativos significativos en la salud humana, la economía y la seguridad, tal como lo demuestra una gran cantidad de publicaciones científicas.