Grandes líderes como el estadounidense Joe Biden o el británico Boris Johnson ya han puesto fechas marcadas en rojo el calendario de vacunación. Y el Gobierno español ha decidido hacer lo mismo, pese a que los retrasos en las entregas han impedido cumplir a tiempo el primer compromiso: vacunar al 80% de la población mayor de 80 años en marzo. El objetivo se cumplirá esta semana. Pese a ello, en una comparecencia por sorpresa en la Moncloa tras el Consejo de Ministros y aceptando preguntas de los periodistas por primera vez desde febrero, Pedro Sánchez, garantizó ayer que con la planificación “más prudente y conservadora”, la meta hasta ahora inconcreta de vacunar al 70% de la población “al final del verano”, es decir, a 33 millones de personas, se cumplirá efectivamente a “finales de agosto”.

También ha anunciado que no habrá prórroga del estado de alarma y profetizó que “nos estamos aproximando al final de esa pesadilla, ya queda menos”. Lanza este mensaje cuando los virólogos sitúan a España a las puertas de la cuarta ola y los datos evidencian una escalada de contagios. Además, media Europa está en alerta máxima.

Por el camino, Sánchez ha sido aún más preciso al marcar varios “hitos” en el plan de vacunación, empezando por la próxima semana, cuando habrá más inmunizados con la pauta completa que el número total de infectados desde que llegó el virus. El balance actual es de 2,8 millones de personas con las dos dosis (el 6% de la población española) frente a 3,3 millones de contagiados notificados mediante una prueba de COVID.

Las siguientes metas marcadas por el presidente son el 3 de mayo, cuando previsiblemente habrá cinco millones de vacunados con la pauta completa. La primera semana de junio, esta cifra subirá a los 10 millones; el 14 de junio, a los 15 millones, y el 19 de julio, a los 25 millones. Así, hasta lograr que “33 millones de personas estén inmunizadas para finales de agosto”.

El presidente ha asegurado que, pese a que el contexto es “tremendamente complejo”, el sistema tiene capacidad para administrar 3,5 millones de dosis semanalmente. Y la previsión es que durante este trimestre “se acelere” el proceso, de forma que España reciba 38 millones de viales, lo que supone 3,5 veces más que los entregados hasta ahora (9,6 millones). En este calendario se incluye la llegada “antes de junio” de 5,7 millones de dosis de la vacuna de Janssen, que sólo requiere de un pinchazo, lo que contribuirá, a juicio del Gobierno, a cumplir con las metas previstas.

Asimismo, entre julio y septiembre e incluyendo las dosis de CureVac, antígeno que está en proceso de aprobación por parte de la UE, el Gobierno espera la llegada de 48 millones de dosis más. “En total hay contratadas más de 87 millones entre abril y septiembre, esto nos va a permitir asegurar que cualquiera que lo desee pueda ser vacunado en este periodo”, garantizó el presidente.

En tono optimista, Sánchez adelantó también que una vez vencido el plazo del estado de alarma, el próximo 9 de mayo, el Gobierno no prevé prorrogarlo. “Lo que queremos es que el 9 de mayo sea punto y final, ese es nuestro propósito y para ello trabajamos”, sostuvo. A partir de esa fecha, serán por tanto las autonomías y el Consejo Interterritorial los que decidan si continúan los cierres perimetrales o la prohibición de las reuniones en domicilios, con el inconveniente de que la muchas de estas medidas tendrían que ser ratificadas por la justicia, algo innecesario con el estado de alarma.

Si no se renueva el estado de alarma, toda la gestión quedaría en manos de las comunidades, sin toque de queda, la medida estrella. Las autonomías podrían cerrar comercios y otro tipo de medidas, pero no hacer toques de queda. Además, aunque Sanidad prevé que en mayo baje la incidencia, gracias precisamente a la vacunación, por el momento se registra un repunte que ha obligado a varias comunidades a endurecer de nuevo las restricciones. Pero Sánchez ha puesto el foco en la inmunización, tras reconocer que “la vacunación es la política económica más eficaz”.

La Xunta critica la decisión unilateral

La Xunta exige saber cuál es la alternativa al estado de alarma para gestionar la pandemia, tras el anuncio de que no habrá una nueva prórroga. Fuentes del Ejecutivo autonómico advierten de que “seguimos sin legislación estatal para gestionar la pandemia” y lamenta que “una decisión trascendental que afecta especialmente a las CC AA se tome sin consultar, un nuevo ejemplo de cómo entiende la cogobernanza este Gobierno”. “Una decisión precipitada”, aún sin saber si fruto de la Semana Santa habrá una cuarta ola. Así calificó ayer el portavoz de la Junta de Andalucía, Elías Bendodo, el anuncio de que no habrá otro estado de alarma. Tampoco convence la decisión a Cataluña. La consejera de Presidencia de la Generalitat, Meritxell Budó, pide un acuerdo en función de “la evolución de los datos epidemiológicos” y duda que sea buena idea, pues en mayo “difícilmente” habrá una importante parte de la población ya vacunada. La presidenta del Gobierno de Baleares, Francina Armengol, quiso ser prudente: “Hemos de asegurar la desescalada lenta y medidas restrictivas y es el Gobierno de España el que nos tiene que dar la garantía jurídica para poderlo hacer, creo que eso sí es importante” . El vicepresidente de Navarra, Javier Remírez, considera que es demasiado pronto para decidir si en mayo España estará en condiciones de levantar el estado de alarma. El apoyo más claro que recibió ayer Pedro Sánchez fue el del titular de Canarias, Ángel Víctor Torres, quien habló de “una noticia magnífica”. Desde la Generalitat de Valencia también se respalda la decisión y se asegura que “Valencia está preparada”.

Peligrosas aglomeraciones en la vacunación de Santiago

La Cidade da Cultura, en la capital gallega, fue otro de los puntos neurálgicos de vacunación masiva en Galicia, aunque allí la situación se descontroló hasta tal punto que la Policía se vió obligada a pedir por megafonía que solo se pusieran en la cola los que estaban citados en la siguiente hora. Muchos habían acudido a su cita hasta con tres horas de antelación. "Tengo miedo; estoy decidida a marcharme para casa", comentaba una de las asistentes que esperaba por su dosis. Otra mujer, ya vacunada, se mostraba indignada por la mala organización: "Si no lo he cogido en un año, que no pude ver a mis nietos, lo cogí hoy ahí".

Vacunación en Santiago: "Si no lo he cogido en un año, que no pude ver a mis nietos, lo cogí hoy ahí"

Vacunación en Santiago: "Si no lo he cogido en un año, que no pude ver a mis nietos, lo cogí hoy ahí" Agencia ATLAS

Madrid, País Vasco y Navarra, en riesgo extremo

La pandemia de coronavirus suma 6.623 nuevos contagios en España y la incidencia acumulada por cada 100.000 habitantes en 14 días vuelve a crecer hasta 164,7 casos (1,4 puntos más que ayer). La cifra de nuevos casos es superior a la del mismo día de la semana pasada, cuando se notificaron 4.994 positivos. En los últimos catorce días, se han registrado 78.154 nuevos positivos. Finalizada la Semana Santa en todas las comunidades, según los datos del Ministerio de Sanidad, tres comunidades y Ceuta y Melilla siguen con cifras de riesgo extremo (más de 250 casos): Navarra (363,2), Madrid (287,6), País Vasco (272,8), Ceuta (366,9) y Melilla (432,9). Además, en las últimas 24 horas se han reportado 128 muertes más, en comparación con 106 el martes pasado, y 237 en los últimos siete días. Hasta 75.911 personas con prueba diagnóstica positiva han fallecido desde que el virus llegó a España, de acuerdo con los datos recogidos por el Ministerio. Actualmente, hay 9.463 pacientes ingresados por COVID-19 en toda España (8.944, un día antes) y 1.990 en UCI (1.925 , la jornada anterior). En las últimas 24 horas, se han producido 1.126 ingresos (931 ayer) y 850 altas (437 ayer). La tasa de ocupación de camas ocupadas por coronavirus se sitúa en el 7,61 por ciento (frente al 7,49% del día anterior) y en las UCI en el 19,92 por ciento (19,65% un día antes).