Agentes de la Guardia Civil de Lugo han auxiliado a un octogenario a encontrar dinero que había escondido en su vivienda y a ingresarlo en una entidad bancaria en el municipio de A Pastoriza.

Según ha relatado el Instituto Armado, el pasado mes de febrero agentes fueron requeridos para auxiliar a un hombre de 89 años de edad para realizar un ingreso en una entidad bancaria de una "elevada cantidad de dinero" que guardaba en su vivienda.

Una vez en su domicilio, "se le pudieron detectar ciertas incoherencias en sus declaraciones, viendo cómo portaba una bolsa en la mano que contenía varios fardos de billetes perfectamente embalados", han indicado las mismas fuentes.

Tras realizar el ingreso, el octogenario manifestó que creía tener más dinero en casa, si bien ignoraba el lugar donde lo guardaba ya que recientemente había hecho un reintegro.

De vuelta al domicilio, y tras buscar en distintas dependencias, un agente de la Guardia Civil localizó en medio de la leña que tenía en la cocina un envoltorio con una gran cantidad de dinero. El hallazgo alegró "enormemente" al propietario, que no recordaba haberlos escondido allí, han abundado las mismas fuentes.

De nuevo, los agentes acompañaron al octogenario a la entidad bancaria para realizar un nuevo ingreso con la reciente cantidad encontrada.

Al día siguiente, "a sabiendas que el octogenario vivía solo y sin apoyo familiar", destaca la Benemérita, un agente de la Guardia Civil se trasladó de nuevo a su domicilio para interesarse por su estado. Al llegar se encontró con la puerta cerrada, persianas bajadas y sin humo saliendo por la chimenea, "todo ello algo inusual, por lo que temiendo que pudiera sucederle algo se le llamó de viva voz en varias ocasiones y se golpeó la puerta, sin que respondiera a los llamamientos".

Al ver que los vecinos tampoco sabían nada de él, un agente subió por una escalera de mano para desmontar la tapa de la persiana del dormitorio. Dentro estaba el anciano, tumbado en la cama.

Desorientado en el suelo

"Tras golpear la ventana en varias ocasiones, el hombre reaccionó y consiguió levantarse, pero tan desorientado que no atinaba a abrir correctamente la ventana ni a hablar de forma coherente", han relatado las mismas fuentes.

Finalmente se le conminó a que bajase a abrir la puerta. Sin embargo, al ver que no aparecía en la planta inferior y tras escuchar fuertes golpes, se solicitó auxilio del 061. Al lugar acudió una ambulancia y, tras forzar la puerta con una pata de cabra para prestarle asistencia, fue hallado tirado en el suelo de una de las habitaciones "muy debilitado y desorientado, sin poder levantarse", ha asegurado la Guardia Civil.

Ante tal escenario, el facultativo médico decidió trasladarle al Hospital Universitario Lucus Augusti (HULA) de Lugo. Tras realizarle una primera exploración, manifestaron "que la ardua actuación de la Guardia Civil posibilitó el auxilio a la víctima no teniendo que lamentar consecuencias irreparables", han resaltado las mismas fuentes.

A continuación, se practicaron gestiones con la trabajadora social del Ayuntamiento con la finalidad de conseguir su ingreso en un centro geriátrico y se ha informado de todo lo acontecido a las autoridades judiciales.