Más de medio centenar de documentos inéditos de Celso Emilio Ferreiro (Celanova, 1914 - Vigo, 1979) que fueron conservados por el Colegio de Procuradores de Vigo, quedarán depositados en la fundación que lleva su nombre. El hallazgo abre una ventana por primera vez en la vida profesional de uno de los principales poetas sociales gallegos, que ejerció en Vigo como procurador y que fue miembro de la junta de gobierno del colectivo entre 1950 y 1966, participando incluso en la redacción de sus estatutos. Además, 2021 será el año de Celso Emilio Ferreiro como procurador. Con motivo del 70 aniversario de su ingreso en el Colegio, el colectivo quiere destacar su figura menos conocida para nombrarlo “procurador vigués de honor” en la próxima junta general extraordinaria, que se celebrará la próxima semana.

  • Firma autógrafa, 1950

    El primero de los documentos, que data de 1950 incluye la socilitud de Celso Emilio Ferreiro para formar parte del Colegio de_Procuradores de Vigo. Uno de los últimos está fechado en 1966: es su carta de baja, que constata su exilio a Venezuela.

Los 16 años de ejercicio de Celso Emilio Ferreiro como procurador coinciden justo con su época más prolífica a nivel literario: vieron la luz textos como “O soño sulagado” (1955) y el poemario icónico “Longa noite de pedra” (1962), así como artículos en una sección de FARO DE VIGO llamada “La jaula de los pájaros raros”.

También el director de la fundación e hijo del autor, Luis Ferreiro, destacó que la actividad del derecho procesal sostuvo a Celso Emilio y a la familia desde el punto de vista económico en esa etapa. En una de las cartas descubiertas, el escritor alude a las dificultades económicas que atraviesa y le impiden abonar las cuotas. Ahí contextualiza Luis Ferreiro una época en la que empezaron a ser conocidas las actividades políticas de Celso Emilio “y los ingresos empezaron a mermar, tanto en el campo de la litografía, dado que tenía un taller, como en la actividad procesal”.

“Yo no soy estudioso de literatura, pero tengo claro que si Celso Emilio Ferreiro no ejerciera como procurador, no sería el mismo poeta”, aseguró el decano del Colegio de Procuradores, José Antonio Fandiño, en el acto de ayer. Ese comentario dio pie al análisis de algunos de los términos jurídicos incluidos en sus versos.

El archivo del Colegio Oficial de Procuradores de Vigo atesoraba en su haber una carpeta con hasta 65 inéditos, que fueron presentados ayer en el Museo MARCO donde también se ubicaban los juzgados en el momento en que ejercía Celso Emilio. Entre la documentación se hallan curiosidades como su renuncia, en una carta dirigida al decano del colectivo (Higinio Facorro) y también su rúbrica en los propios estatutos del Colegio, en 1950.

En el acto, que contó con la presencia del director del museo MARCO, Miguel Fernández, se anunció que desarrollarán diversas iniciativas alrededor de la figura de Celso Emilio, entre las que se incluyen la edición de una tarjeta de Navidad conmemorativa.