El toque de queda comenzó ayer en Castilla y León. La restricción de movilidad se extiende entre las 10 de la noche y las 6 de la mañana, en principio durante quince días renovables. La decisión, del Gobierno de Alfonso Fernández Mañueco, se sustenta sobre la base jurídica de la Ley Orgánica 3/1986, de 14 de abril, de medidas especiales en materia de salud pública. Ahora debe ser refrendada por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.