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Mucha pantalla de niño, poca visión

Los niños gallegos tienen su primera pantalla a los 8 años, aunque sus padres apoyan retrasarlo hasta los 10 - Los especialistas alertan de los riesgos de la sobreexposición

Mucha pantalla de niño, poca visión

Los dispositivos electrónicos se han convertido en los reyes de los deseos navideños para los niños gallegos, que cada vez los piden a edades más tempranas. Con siete años, las videoconsolas y otros dispositivos electrónicos son el principal reclamo de los pequeños de la casa. Sin embargo, los padres gallegos consideran que sus hijos deberían recibir este tipo de dispositivos como regalo navideño cumplidos ya los diez años, según el estudio "Screen Pollution: las pantallas y los niños en Navidad" encargado por una firma líder en el sector óptico, aunque en realidad la realidad es que obtienen su primera pantalla con ocho años. Asimismo, el 54% de los menores ya ha obtenido algún obsequio navideña con pantalla a los seis años, un 61% a los 8, un 77% a los 10 y ya alcanzados los 12, un 93%. Es más, este año un 40% de los encuestados en Galicia afirma que entre los regalos que sus hijos esperan recibir se encuentra algún dispositivo con pantalla y un 47% admite que invertirá, de media, 93 euros, por debajo de la media española (112 euros), en cumplir sus deseos y regalárselo

El 93% de los padres gallegos se muestran partidarios de limitar de alguna manera el uso de los menores de los dispositivos con pantallas. Como forma de supervisión, de este porcentaje, un 91% lo limitaría haciendo que lo usen menos horas, un 86% que los usen para acceder a ciertos contenidos y un 69% cree que solo los deberían utilizar cuando ellos están presentes. De las casi tres horas de media que los menores gallegos están delante de una pantalla, los padres consideran que debería reducirse a la mitad en los días laborables y no llegar a las tres horas los fines de semana, pasando a considerar otras alternativas de ocio relacionadas con estar jugando o al aire libre

Sin embargo, la sobreexposición a las pantallas puede perjudicar seriamente la salud visual de los niños. En este sentido, Eduardo Eiroa, presidente del Colegio de Ópticos-Optometristas de Galicia, alerta de que la sobreexposición a las pantallas, sin mantener una distancia mínima de seguridad está dando lugar a una progresión de la miopía más rápida en pacientes jóvenes, algo que no sucede en niños que pasan más tiempo al aire libre que delante de un dispositivo electrónico. De hecho, hay estudios que constatan que los menores que pasan más tiempo jugando y realizando actividades al aire libre tienen menos riesgo de sufrir esta deficiencia refractiva. Además, quienes permanecen demasiado tiempo en espacios cerrados y/o delante de las pantallas desarrollan una peor visión periférica, que es la que nos sirve para ubicarnos en el espacio. Por si esto fuera poco, el exceso de luz azul-violeta de la pantalla podría provocar fatiga visual y, en el peor de los casos, generar problemas oculares más severos, como problemas en visión próxima en edades tempranas.

"La fatiga visual se manifiesta cuando los ojos realizan un esfuerzo acomodativo excesivo como consecuencia de actividades que implican ver de cerca durante un largo periodo", asegura Eiroa-.

Algunos síntomas derivados de un uso prolongado de este tipo de dispositivos son visión borrosa transitoria, dificultad de enfoque en diferentes distancias, sensibilidad al brillo de la luz, incomodidad ocular, dolor de cabeza y ojos irritados, secos o cansados. "Si los niños ya estudian con pantallas, no deberían vincular también a las pantallas su ocio, porque esto les va a ocasionar más estrés y cansancio visual", afirma el óptico.

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