La temporada de caza menor comenzó ayer en Galicia con disparidad en las capturas. El sector prevé que esta será una de las mejores campañas de los últimos años, y esas altas expectativas se vieron cumplidas en la comarca de Arousa. Allí la satisfacción fue unánime por la abundancia de conejos y faisanes en el monte. Sin embargo, los cazadores del Deza mostraron su decepción por la escasez de capturas, a excepción de Rodeiro, y atribuyeron el pobre balance a la falta de rastro por las intensas lluvias y a la niebla.

Los aficionados arousanos disfrutaron de un día de caza en el monte con mayúsculas, pues además de levantar docenas de piezas y ver trabajar a los perros, la meteorología fue también propicia para pasar el día al aire libre.

Jesús Beloso, de Karsita (Vilagarcía), plantea que "hay bastante caza". "El que más y el que menos pudo tirarle a cuatro o cinco conejos. Todas las pandillas colgaron alguna pieza". Ellos cazan en Xiabre, y afirma que también avistaron bastantes perdices.

Más al sur de la comarca, los aficionados de Rías Baixas, que comprenden terrenos de los municipios de Cambados y Vilanova, también hacen un balance positivo. "La verdad es que nos ha ido bastante bien", aduce el presidente, Martín Vilas. "Todo el mundo se cobró alguna pieza, ya fuese un conejo o un faisán. Todo el mundo está contento".

A la abundancia de conejo, que es la especie principal de caza menor en O Salnés se sumó en este arranque de la campaña la de las especies de pluma. Según Vilas, algunas pandillas de Rías Baixas levantaron hasta una docena de faisanes a lo largo de la jornada.

En cambio, las sociedades cinegéticas del Deza y Tabeirós registraron muy escasas capturas por dos factores: el mal tiempo y la falta de forma física y anímica de los canes.

Las intensas lluvias caídas durante la madrugada borraron cualquier rastro de perdiz y de conejo, y la niebla hizo aún más difícil el trabajo de los perros en las zonas de Dozón donde suele haber más caza. "El día acompañó más a o menos, salvo por la mañana", con lluvia casi intermitente en algunos puntos, como explica el presidente de los cazadores de este municipio, José Rodríguez.

Las bajas temperaturas, que en municipios como_Lalín no sobrepasaron los 13 grados, forzaron además que los conejos optasen por no salir de las toberías. "Así que tuvimos muy pocos disparos en el coto", explica Javier Santos, el presidente de la Sociedade de Caza de Cerdedo.

De idéntica manera se expresa el presidente del colectivo de cazadores de Lalín, Julio Mariño. "Era más o menos lo que preveíamos, que no hubiese muchas capturas. Pero aún es pronto para hacer una previsión para toda la temporada", explicó Mariño.