El telescopio espacial Hubble de la NASA y la ESA ha revelado la belleza intrincada y detallada de las nubes de Júpiter en una nueva imagen, tomada el pasado 27 de junio, en la que presenta a su característica Gran Mancha Roja y una variedad de colores más intensa que en fotografías anteriores en las nubes que se arremolinan en la turbulenta atmósfera del planeta.

Entre las características más llamativas de la imagen están los colores intensos de las nubes que se mueven hacia la Gran Mancha Roja. Esta enorme tormenta anticiclónica tiene aproximadamente el diámetro de la Tierra y está girando en sentido antihorario entre dos bandas de nubes que se mueven en direcciones opuestas hacia ella.

Al igual que con las imágenes anteriores de Júpiter tomadas por Hubble, y otras observaciones de telescopios en tierra, la nueva imagen confirma que la enorme tormenta que ha azotado la superficie de Júpiter durante al menos 150 años continúa reduciéndose. La razón de esto aún se desconoce, por lo que Hubble continuará observando a Júpiter con la esperanza de que los científicos puedan resolver este enigma.

Asimismo, tormentas mucho más pequeñas aparecen en Júpiter como óvalos blancos o marrones que pueden durar tan solo unas pocas horas o extenderse durante siglos.

La característica en forma de gusano ubicada al sur de la Gran Mancha Roja es un ciclón, un vórtice que gira en la dirección opuesta a la que lo hace la Gran Mancha Roja. Los investigadores han observado ciclones con una amplia variedad de apariencias diferentes en todo el planeta. Las dos características ovales blancas son anticiclones, similares a las versiones pequeñas de la Gran Mancha Roja.