Los destellos de más de 3.000 rayos iluminaron el cielo gallego en la primera gran tormenta que se ha vivido este verano en la comunidad. Según informa la agencia de meteorología Meteogalicia, la mayor parte del aparato eléctrico afectó a la provincia de Lugo, aunque también afectó con fuerza a la comarca de Deza, donde una impresionante tromba de granizo a las 19.00 horas del jueves causó importantes daños en coches y edificios. El concello de San Xoán de Río, en Ourense, sufrió un corte de luz durante varias horas debido a una avería en un transformador.

Durante la tarde de ayer la Agencia Española de Meteorología (AEMET) activó la alerta naranja por tormentas en Lugo y en el interior de la provincia de A Coruña. En total fueron más de 3.000 los rayos registrados en Galicia. El epicentro se situó en la provincia lucense, donde arrancaba el Resurrection Fest, el festival de música grande de Galicia. Las lluvias, los relámpagos y los truenos no hicieron otra cosa que dar más épica al último concierto en España de la banda de 'trash metal' Slayer. Durante la actuación de los estadounidenses en Viveiro, que tuvo que aplazarse durante una hora, varios rayos cruzaron el cielo justo por encima del escenario.

Tromba de granizo en Lalín y Silleda

La tormenta sorprendió a la comarca de Deza con una intensa granizada, que en apenas diez minutos, provocó importantes daños. Era en torno a las 19.00 horas cuando se escuchó un fuerte ruido ocasionado por el pedrisco que caía en las calles, que obligó a los viandantes a ponerse al cubierto. Fueron cuantiosos los destrozos registrados en vehículos y en inmuebles. Las compañías de seguros colapsaron sus líneas ante la cantidad de llamadas recibidas para alertar de las múltiples incidencias. En Lalín, en Silleda y, al menos también en Agolada, vehículos sufrieron múltiples abolladuras y se perforaron cubiertas debido al tamaño del pedrisco, algunos como de canicas, pero había otros que semejaban bolas de futbolín.

Previsión para el fin de semana

La AEMET mantiene el nivel de alerta amarillo por tormenta para este viernes en Lugo y A Coruña, mientras que Meteogalicia pronostica una jornada de inestabilidad en la comunidad debido a las bajas presiones y al aire frío en altura. Los cielos permanecerán parcialmente nublados al principio del día por el oeste y más claros en general por la tarde. Conforme avance el día crecerán nubes de evolución que podrán dejar chubascos tormentosos.

En Vigo se espera un fin de semana nuboso pero con temperaturas agradables. Las máximas podrían alcanzar los 24º este sábado mientras que las mínimas no descenderán de los 15º. Más calor espera a los ourensanos, donde a pesar de los cielos nublados los termómetros subirán hasta los 31º.