Los casos de violencia de género han aumentado en Galicia un 4,1% en el último año, al pasar de 1.255 víctimas a 1.306, según la Estadística de Violencia Doméstica y Violencia de Género (EVDVG) que elabora el Instituto Nacional de Estadística y cuyos datos acaban de conocerse. Aún así, en valores relativos -la tasa por cada 1.000 mujeres de más de 14 años- la comunidad está entre las últimas de España, junto a Cataluña y País Vasco.

Pero los datos no invitan al optimismo. El número de víctimas de violencia machista ha aumentado en todas las comunidades entre 2017 y 2018, salvo en Extremadura, donde ha habido 14 menos, y en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, donde también se ha reducido el número, avalan los datos del INE. La fiabilidad de las cifras parece irrebatible: dicha estadística está elaborada con datos del "Registro central para la protección de las víctimas de la violencia doméstica y de género" y se realiza por el INE en virtud de un acuerdo de colaboración suscrito con el Ministerio de Justicia. Es decir, contabiliza las víctimas que tienen órdenes de protección frente a sus agresores o a los que han impuesto medidas cautelares tras haberlas agredido. Así, en números absolutos, Andalucía es la comunidad que más víctimas ha registrado, 7.047, seguida de la Comunidad Valenciana, con 4.794 y Madrid, con 3.656 casos.

Dicho esto, más de tres de cada mil mujeres de 20 a 39 años están reconocidas como víctimas de violencia machista en España, lo que representa un 7,9 % más que en 2017. Y eso significa que en 2018 se registraron 31.286 agredidas, con datos correspondientes a los asuntos en los que se habían dictado medidas cautelares u órdenes de protección.

De lado opuesto, un total de 31.250 hombres fueron denunciados por violencia de género, lo que representó un 7,8% más que en el año anterior. Casi la mitad de los denunciados (48,1%) se concentraron en las edades de 30 a 44 años. La edad media de los denunciados fue de 39,3 años.

También se puede perfilar un 'retrato robot' de las víctimas. Casi la mitad de las agredidas en casos de de violencia de género (el 47,3%) tenían entre 25 y 39 años. La edad media de las víctimas fue de 36,5 años. Alarmantemente, los mayores aumentos del número de víctimas en 2018 se dieron entre las mujeres de 60 a 64 años, con un crecimiento de 15,1% -no ha trascendido tras cuántos años de evolución- y entre el grupo de 18 a 19 años, con un 10,9% más.

La violencia machista que arranca en la juventud es uno de los asuntos que más preocupa a las expertas. La psicóloga del "Programa de atención psicolóxica a víctimas de violencia de xénero e ós seus fillos e fillas", Alicia Peralejo, reflexiona a FARO. "En nuestra sociedad se ha 'erotizado' el maltrato, de hecho no existe la palabra 'buentrato' . En las películas de adolescentes, en las novelas, siempre es el malote el que gusta a las chicas; de alguna forma es lo que nos han vendido socialmente", profundiza. "En las escuelas es fundamental dar formación sobre lo que es violencia, asertivad, autoestima, pensamiento crítico [...] enseñar que la violencia va en escalada y hay que poner límites a las personas con las que nos relacionamos. Si en una relación de pareja nos hacen sentir mal, esa relación no funciona y no pasa nada. El límite a cualquier relación es siempre nuestra dignidad", insiste.

En caso de víctimas adultas, "hay que trabajar muchas cosas, que tienen que ver con sobrevivir muchas veces a un acto traumático, que pudo haber acabado con su vida", razona. Y en caso de tener hijos o hijas, se suma el conflicto de saber que están en peligro. Peralejo, que también trabaja en el programa "Abrámolo círculo" -que atiende a hombres que ejercen la violencia- explica que el Colegio de Psicología de Galicia aporta posibilidades de psicoterapia a mujeres e hijos víctimas de violencia de género.

En la misma línea, el Policía Local de Vigo y delegado de Galicia de la Asociación "Stop Violencia de Género Digital", Santiago Martínez Pardo, alude precisamente a la gravedad de los casos más jóvenes. "Es importante resaltar las cifras en los menores de 18 años, donde creo que la violencia digital tiene una gran justificación. La pérdida de identidad, cuando, como prueba de 'amor', les facilitan a su pareja los datos de identidad digital de usuario y contraseña de sus móviles o redes sociales, hacen que el poder de control de uno sobre el otro se vaya incrementando, con la consiguiente pérdida de autoestima", razona. "La dependencia, el miedo, estrés, depresiones, o inseguridad son síntomas de que empiezan a vivir fases de violencia", apunta Martínez. "Es muy importante seguir trabajando, porque esta violencia digital en los menores, es la antesala de la violencia de género de adultos del futuro", añade. Martínez. Además, el policía en Vigo reflexiona que, aunque no hay una política unificada en la UE, "las políticas de igualdad aplicadas en países donde son reales y efectivas, traen como consecuencia una facilidad de identificar los casos de violencia de género". Por eso son más visibles. "La sociedad no la tolera y se denuncia, teniendo todo el apoyo y confianza en la justicia".

Alicia Peralejo - Psicóloga. At. víctimas viol. género

"Se 'erotiza' el maltrato en películas y novelas de adolescentes... el 'malote' es el que gusta, o eso nos han vendido"

Santiago Martíñez - Policía local. Stop violencia de género digital de Galicia

"La violencia digital en menores es la antesala de la violencia de género en adultos"