El té verde reduce la obesidad y varios biomarcadores inflamatorios relacionados con la mala salud. Así se desprende de un estudio en ratones de la Universidad Estatal de Ohio. Los beneficios parecen derivarse de una mejor salud intestinal, que incluye microbios más beneficiosos en los intestinos y menos permeabilidad en la pared intestinal. El té verde podría estimular el crecimiento de bacterias intestinales "buenas". La dosis probada en ratones equivaldría a 10 tazas de té verde durante el día para una persona.