El pleno del Congreso apoyará la ley de muerte digna, planteada hace un año por Ciudadanos y que garantiza el derecho de las personas a morir con dignidad, sin alargar su sufrimiento y a respetar sus últimas decisiones. A falta de la votación final, al menos PP, PSOE, Unidos Podemos En Comú Podem-En Marea y Ciudadanos, que suman mayoría, adelantaron que respaldan la ley, que da garantías jurídicas a los profesionales sanitarios aunque mostraron sus discrepancias por el régimen sancionador.

El PSOE defiende que sean las comunidades las que tengan las competencias, un aspecto que rechaza Ciudadanos, en tanto que el PP insiste en que sin un régimen sancionador común la ley de derechos y garantías de la dignidad de la persona en el proceso final de su vida está incompleta. El socialista Jesús María Fernández recordó que son diez las comunidades que ya tienen leyes propias -entre ellas Galicia-, por lo que ve "innecesario" sanciones comunes.

Desde Ciudadanos, Francisco Igea recordó que en España mueren cada al año 50.000 personas sin cuidados paliativos por lo que en España "se muere mal". Igea apuntó que esta ley garantiza que nadie pueda ser engañado por un médico con falsas promesas y que, en cambio, se les pueda inducir al sueño para no sufrir.

Pilar Cortés, del PP, mostró su satisfacción por la aprobación de esta ley "especial" ya que afecta a todos por igual al margen de la ideología, familia o lugar de residencia si bien dijo que no está completa si no se incorpora el régimen sancionador o una enmienda de UPN -partido que se opone- para que esté reconocido el derecho a la asistencia espiritual y religiosa.

Amparo Botejara (Unidos Podemos) también estimó que en España se muere mal y espera que esta ley sirva para corregir esta situación, si bien advirtió si no está dotada de financiación, "no tendrá utilidad".