El Papa espera que el primer pacto mundial para la migración establecido recientemente por la ONU sirva para "trabajar con responsabilidad, solidaridad y compasión hacia quienes por distintos motivos han dejado su propio país".

Francisco ha hecho estas consideraciones durante el Ángelus de ayer domingo. Asomado a la ventana de su estudio privado en el Palacio Apostólico, el pontífice deseó que este acuerdo sirva para proteger a los inmigrantes. "Confío esta intención a vuestras oraciones", señaló.

Un total de 156 Estados miembros de la ONU apoyaron el pasado 10 diciembre en Marrakech (Marruecos) el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular, un documento no vinculante que busca mejorar la gestión de los flujos migratorios y que finalmente no ha contado con la firma del total de 193 integrantes de Naciones Unidas.