Con humildad, Jorge Candán admite que ha perdido la cuenta de las veces que ha ganado el Campeonato de España de Vídeo Submarino. "Creo que esta es la cuarta o quinta vez, no estoy seguro", explicó ayer a FARO tras volver a alzarse con el primer premio del certamen, celebrado este fin de semana en Cabo de Palos (Murcia). El vigués, con más de veinte años de experiencia, también ha ganado en tres ocasiones el Festival de Cine Submarino de San Sebastián y ayer, tras recibir el premio, cruzó la península en coche para regresar a la ciudad.

En esta ocasión lo hizo acompañado por el pontevedrés Lino Fontán, quien ya participó con él en una ocasión en la que también subieron al podio. A Galicia también se vino el tercer premio, logrado por los vilanoveses Francisco Ventoso y Ángel Rey, por lo que la comunidad se proclamó campeona de España por equipos.

Candán, que el año pasado se trajo a Vigo la medalla de plata, confiesa que en esta ocasión pudo llevar bien preparado el montaje, con el guión, la música para un vídeo en el que quiso hacer una denuncia de la violencia de género, utilizando el mar como metáfora. "Hay un mar que es una reserva donde todos los animales están protegidos y quisimos hacer un paralelismo con esa idea y la de que esa protección también debe estar presente en la familia .La humanidad también debería ser una reserva", explicó el fotógrafo y documentalista submarino, que ahora podrá intentar revalidar el título mundial, alcanzado en 2010 con su mujer, Pilar Barros, que lo acompañará de nuevo el próximo año al certamen, que tendrá lugar en Tenerife. Antes de que acabe el año, en noviembre, ambos participarán en unas jornadas organizadas en la zona para poder conocer los fondos submarinos de la zona y preparar así el documental que tendrán que grabar y montar en un tiempo récord. Y es que en eso consiste la dinámica del campeonato nacional y mundial, en que los participantes disponen de un tiempo limitado para grabar las imágenes en el lugar donde se celebra la competición y luego de otro periodo, también reducido, para realizar el montaje del vídeo. Candán, que además es un experto de los fondos marinos de las Cíes, reconoce que en algunas ocasiones ha participado casi "improvisando" pero trata siempre de tener una idea clara de lo que debe ser el resultado final.

Así, en Cabo de Palos los buceadores participantes pudieron realizar inmersiones en las mejores zonas de la reserva marina para grabar las imágenes que luego trasladan al documental. "Todo depende bastante de los animales que te encuentres en estas inmersiones pero además de la suerte también es importante el conocimiento de las especies, saber dónde buscarlas porque algunas están siempre juntas y para localizar a una en concreto debes saber por dónde y con qué otros animales se mueve", explicó Candán, que luego dispuso de tres jornadas para editar el vídeo, en el que pueden incluir hasta un máximo de un 15 por ciento de imágenes externas que en esta ocasión fueron de niños para enfatizar el mensaje contra la violencia de género.