Tras dos jornadas sin ningún incidente vinculado con la ola de calor, ayer un bombero recibió asistencia médica por un posible golpe de calor mientras trataba de apagar un incendio declarado en un pajar en Tomiño, según informó 112 Galicia. El suceso ocurrió a las cuatro de la tarde después de iniciarse fuego en un pajar en el que se almacenan alpacas y diversa maquinaria agrícola situado en el lugar de Cristelos. También había animales que, al igual que las máquinas y otros enseres fueron alejados de la zona en llamas. Los servicios sanitarios señalaron que el bombero fue atendido allí mismo sin que fuese preciso su traslado.

De confirmarse, como indicó el 112 Galicia, que se trató de un golpe de calor, se trataría del primer afectado en Galicia por la ola de calor, que ya se ha cobrado tres víctimas mortales (dos en Murcia y un tercero en Barcelona) y una cuarta persona fue hospitalizada el viernes muy grave también en Murcia por el mismo motivo.

Detectar los síntomas

Una bajada del nivel de consciencia, desorientación, confusión mental, convulsiones, fiebre que puede llegar a los 40 grados o piel muy caliente y seca, enrojecimiento, respiración y presión cardiaca aceleradas son señales de que se sufre un golpe de calor, ante el que hay que actuar de inmediato y pedir asistencia médica para evitar un colapso. Se trata de la situación más grave que generan las altas temperaturas por lo que hay que ir inmediatamente a un hospital o requerir atención médica. Como primera medida y si la persona ha estado trabajando al sol, se recomienda que se la lleve a la sombra, se la desnude, se la moje insistentemente y si es posible, se le apliquen bolsas de hielo en axilas e ingles. Y en el caso de desvanecimiento, hay que poner al enfermo tumbado hacia el lado izquierdo.

Los niños y ancianos son los más susceptibles de sufrir un golpe de calor además de las personas con patologías cardiacas o renales. Según los datos de Sanidad, de los 20 muertos en 2017 por golpes de calor, 9 estaban trabajando en el exterior, tres hacían deporte y en otros tres casos se registraron factores de riesgo ambiental o social.