Se llama Queik, tiene unos 25 años y su vida no ha sido fácil. Muestra de ello, son las cicatrices de amputaciones en los bordes de su aleta, que fueron claves en la identificación de este ejemplar en 2004 por parte de CEMMA. Ahora, el delfín Queik ha sido localizado en las costas portuguesas del Alentejo. Viaja con otro ejemplar, del que en la actualidad están tratando de obtener mejores documentos gráficos.

Durante 11 años, Queik vivió como "residente" en la costa gallega, y ahora ha desarrollado un periplo de más de 500 kilómetros .

Tanto es así que ha batido el récord del fin Gaspar, que fue detectado en Aveiro, lo que hasta la fecha era el viaje más al sur del que hay registros.

Durante su vida en la rías de Vigo y Arousa, fue detectado 40 veces, viajando con la manada que lo acogía, de entre 15 a 30 ejemplares.

La última vez que la CEMMA registró este ejemplar, Queik, fue el 19 de febrero de 2015 frente a la playa de Cabío, A Pobra do Caramiñal. "También es verdad que la falta de financiación para realizar esta actividad no permitió continuarla los últimos años, más allá de la Ría de Vigo, que es donde la CEMMA cuenta con la base de su embarcación Toniña uno", aseguran en CEMMA.

El trabajo de identificación individual de cetáceos, mediante el catálogo fotográfico de las aletas-FotoID, da sus frutos en la detección de los largos desplazamientos de los arroaces, tal y como se felicitan desde la organización de estudio de los cetáceos. "Después de 18 años de trabajo en fotoID contamos con más de 500 aletas diferenciadas individualmente aunque la tasa de repetición es relativamente baja, sobre un 30%", añaden.