Un total de 15 mujeres españolas han sido repatriadas desde el extranjero a España desde el año 2015 por sufrir violencia de género, algunas de ellas con sus hijos menores de edad. Este es el cómputo global ofrecido por el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, que no incluye los traslados efectuados en lo que va de 2018 porque aún no están contabilizados. Estas repatriaciones son facilitadas por el Gobierno desde el año 2015, cuando varios ministerios suscribieron el Protocolo de Actuación contra la violencia de género en el exterior. El objetivo era articular medidas para la atención, asistencia y protección de mujeres españolas que residen en el extranjero y son víctimas de violencia machista. En este contexto, se organizan repatriaciones "cuando la situación lo exija" y según la normativa.

La última española presuntamente asesinada a manos de su pareja en la localidad gala de Pau, así como su hijo, podrían haberse beneficiado de este programa en el caso de haber denunciado su situación ante las embajadas o consulados. Los fallecidos en ningún caso contabilizan en la estadística de víctimas de violencia de género que elabora el Gobierno español porque no residían en España.