Las condiciones atmosféricas han decidido dar una tregua a las Rías Baixas tras varios días de sofocante calor. Desde Meteogalicia, prevén que la presencia de aire frío en capas altas de la atmósfera desplace entre hoy y mañana la masa de aire cálido que convirtió a Galicia en un fogón en las últimas jornadas. Como consecuencia, descenderán varios grados las temperaturas en la fachada costera, un proceso que se inició ayer en algunos puntos de las rías atlánticas por la entrada de lenguas de niebla durante la tarde registrándose en Vigo 28º y en Pontevedra, 29, varios grados por debajo de la previsión realizada.

En el interior de Galicia, especialmente en la provincia de Ourense, las temperaturas fueron extremas. Buena prueba de ello fueron los casi 41 grados centígrados alcanzados en la estación meteorológica de Leiro, concretamente 40,6. Otras dos localidades más, Ourense ciudad y Vilamartín de Valdeorras pasaron de los cuarenta en la jornada de ayer en la que se había decretado alerta naranja en 21 ayuntamientos del Miño ourensano.

Para hoy, Meteogalicia recoge en su boletín que "las temperaturas mínimas estarán sin cambios o descenderán ligeramente, mientras que las máximas descenderán en la mitad sur, principalmente por las Rías Baixas, pero aún se mantendrán o incluso ascenderán en el tercio norte. El viento soplará flojo en general, del nordeste en el tercio norte y de componente oeste en el sur".

No obstante, varios municipios en Ourense seguirán hoy bajo alerta, aunque amarilla. Se trata de las áreas de Valdeorras, Miño y Sur de la provincia. Esto implica que se prevé que los termómetros marquen 36 grados centígrados o más como máxima durante el día.

Se espera para mañana martes que las temperaturas bajen de forma generalizada en toda Galicia, lo que será más acusado el miércoles cuando será muy probable que se registren chubascos en la fachada del litoral atlántico, según Meteogalicia.