Numerosas medusas venenosas carabela portuguesa permanecían ayer en la playa de Patos, en Nigrán, aunque en menor cantidad que el martes. La plaga de physalia physalis, cuya picadura puede resultar mortal, parecía remitir ayer, aunque habrá que esperar para confirmar su eliminación. Así, el Concello de Nigrán desaconsejó el baño en el arenal hasta nuevo aviso tras contactar con la Consellería de Medio Ambiente, la Jefatura de Costas y el Seprona.

Según confirmó el departamento de la Xunta, la invasión de medusas trajo consigo hasta tres tortugas a las costas gallegas, concretamente a Cangas, Bueu y A Lanzada, desde donde fueron trasladadas al centro de la Coordenadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños en Nigrán para recuperarlas. Estos animales son deprededadores de las medusas, que proceden de aguas cálidas y han llegado a Galicia a causa de los temporales.