Hace sólo unas décadas se esperaba que una mujer llegara a la edad reproductiva, se casara y poco después comenzara a tener hijos. Hoy se tienen muchas más opciones: no casarse y no tener hijos, casarse y tenerlos, tener hijos sin padre, tenerlos con tratamientos de fertilidad, trabajar con hijos y trabajar sin hijos e, incluso, tener hijos sin madre.

Son conocidos los casos de actores y cantantes homosexuales que se han buscado un vientre de alquiler para cumplir su sueño de la paternidad. Este es el caso de Elton John, de 65 años, y su marido David Furnish, de 50, que justo el año pasado recibieron a su segundo bebé, Elías José Daniel Furnish-Joh, gestado del mismo vientre que el primero, Zachary.

También el cantante portorriqueño Ricky Martin apostó por la paternidad y hoy es un padre entregado con los mellizos Matteo y Valentino, de 5 años. Martin decidió dar ese paso en 2008, cuando tenía 36 años, estaba soltero y también gracias a un vientre de alquiler anónimo.

El ejemplo de Ricky Martin cundió en Miguel Bosé, que con cincuenta años se atrevió a ser padre de mellizos. Solo siete meses después de la llegada de Diego y Tadeo, el músico tuvo otros dos mellizos, Ivo y Telmo.

A la actriz Maribel Verdú (1970) se le ocurrió asegurar hace más de un lustro que no quería tener hijos y desde entonces le han preguntado en numerosas entrevistas el por qué de tan "sorprendente" elección.

Cameron Díaz es otra de las celebrities que no quiere ser madre. A sus 41 años, la actriz dice que "si hubiera querido niños ya los habría tenido. A las mujeres les da miedo admitir que no quieren ser mamás por temor al rechazo". "Tengo una vida increíble en muchos sentidos porque no tengo hijos. Es simplemente una opción", añade.

Por su parte, la estrella de la exitosa serie "Sex and the City", Kim Cattrall, dejó claro que nunca quiso tener niños: "Disfruto de ellos pero no por largos periodos. Son adorables, graciosos y dulces, y luego? me dan dolor de cabeza".

En la misma onda están famosas como Helen Mirren, Condoleezza Rice y Oprah Winfrey. Al igual que Renée Zellweger, quien confiesa que la jamás ha pensado en la maternidad.

Eva Mendes comparte la misma opinión: "No quiero niños? Me encantan, son muy monos, pero me gusta demasiado dormir y me preocupo por todo".

A veces la incomprensión de la sociedad ante las mujeres que deciden no tener niños traspasa la esfera privada y llega a perjudicar a la vida laboral. Así le sucedió a Julia Gillard, ex primera ministra de Australia. Durante su carrera política ha sido objeto de más de una crítica por parte de sus adversarios por no tener hijos. Tony Abbott, el líder de la oposición en 2012, desacreditó la decisión del Gobierno de Gillard de reducir las ayudas por bebé alegando que carecía "de experiencia en la crianza de los niños". Unas palabras que la líder laborista y sus compañeros de partido interpretaron como un ataque personal hacia la dirigente.

Pero no es necesario ser famosas para manifestar este "no deseo" en público. Una página de Facebook, "Soy mujer y no quiero tener hijos", permite compartir entre las mujeres en esta situación comentarios y sensaciones sin ningún tipo de complejo.