El prestigioso pianista húngaro Imre Rohmann, director de la Orquesta de Cámara de Budapest, entusiasmó ayer a los melómanos vigueses con un concierto a cuatro manos junto con el reputado pianista gallego Pablo Galdo, antiguo alumno suyo, en el que interpretaron piezas de Gries, Schubert, Fauvé y Ligeti. Este fue el broche de oro de un fin de semana en el que el músico impartió clases magistrales a una treintena de alumnos