Cientos de seguidores de la banda británica Muse comenzaron a agolparse a las puertas del recinto de Monte do Gozo desde primeras horas de la mañana de ayer. Algunos, incluso pasaron la noche previa al macroconcierto haciendo cola en la entrada del emplazamiento donde anoche se celebró el festival Xacobeo 10.

Al mediodía, la carretera que comunicaba con Monte do Gozo era un hervidero de fans –la inmensa mayoría de Muse– que subían al recinto para poder conseguir el mejor sitio posible desde el que ver actuar a sus ídolos. Al inicio de la fila, un grupo de madrileños reconocía haber pasado "dos días en la cola" para conseguir entrar los primeros: "Hemos venido por separado. Nos conocemos de coincidir en los conciertos y ahora, cuando vamos a alguno, quedamos y nos reunimos todos" cuenta Aitana.

Los que se quedaron a dormir a la intemperie para conseguir un lugar privilegiado han mostrado su descontento con el trato recibido por parte de los vigilantes y la organización que no les dejaron montar sus tiendas de campaña y tuvieron que recolocarlos en varias ocasiones: "Nos estuvieron mandando de una puerta a otra porque llovía; después para atrás, luego de pié. Un follón", declaran los de Madrid.

Irresponsabilidad

Muchos de los chavales congregados dieron su opinión acerca de la gestión del festival en cuanto a los problemas surgidos con la tardanza en el cierre del cartel o las normas de acceso. "Es una irresponsabilidad que se pongan a la venta las entradas sabiendo solo que estará Muse" comenta el madrileño Francisco ante la polémica creada cuando muchos de los fans de Pet Shop Boys, el otro grupo estrella del festival, se quedaron sin localidades al confirmarse la asistencia de la banda casi un mes después del inicio de la venta de las entradas. "Nosotros venimos por Muse pero es de mala organización que avisaran tan tarde que venían los Pet Shop", sentencia David, de Santiago.

En cuanto a la prohibición expresa de volver a entrar en el recinto una vez abandonado el mismo o introducir bebidas y alimentos, había opiniones para todos los gustos. Algunos, como los vigueses Sabela y Fran, aprobaban tales medidas: "Eso es así en todos los conciertos y es normal que non nos dejen salir. Son muchas horas, pero, si te gustan, los grupos se pasan volando". Pablo, Fran y Patri, otra pandilla de Vigo, se mostraban un poco menos de acuerdo: "Dentro, las cosas son muy caras y es una faena que no dejen pasar nada de comida ni bebida". Por su parte, Raquel, de Carballo, califica de "tontería" lo de prohibir el acceso al Monte do Gozo una vez abandonado el lugar, aunque también considera que la restricción de portar líquidos al interior del concierto es una buena medida de seguridad porque "siempre hay algún graciosillo que tira botellas al escenario y si una tontería de esas sale mal se puede estropear el concierto".

Según la opinión general, la organización del Xacobeo ha acertado de lleno al traer a la banda inglesa Muse, indiscutible protagonista del festival. Sin embargo, algunas voces se posicionan de forma muy crítica al analizar el resto del cartel – Pet Shop Boys, Dj Poti, Jónsi, Dj Vitalic, The Right Ons y Caradeniño Dj–. Los vigueses, Paula, Laín y Darío catalogaron de "delito" mezclar a Muse con Pet Shop Boys, "porque se mezcla rock con dance comercial electrónico". Por su parte, Patri, Pablo y Fran reconocen que solo tienen interés en ver a Muse, pero "los Pet son aceptables". De los demás intérpretes y dj´s, muchos ni sabían sus nombres: "El resto no me interesa. Cuando escuché que estaría Muse me despreocupé de quien venía detrás" señala la carballesa Raquel.

En lo que casi todos los entrevistados coincidieron fue en haber conseguido las entradas vía internet el primer día que se pusieron a la venta. Solo Jaime y Carlos, de A Coruña, reconocieron haber comprado sus localidades en la reventa dos días antes del concierto "por el doble de su precio original".