Manuel Rivas ultima los detalles de su nueva novela, "Todo é silencio", que saldrá publicada el próximo otoño en Xerais y que tiene, como telón de fondo, el tema del narcotráfico.

El autor de "Los libros arden mal" –cuyas obras se convierten en verdaderos fenómenos literarios– prefiere ser precavido y no quiere adelantar detalles de la novela en la que "aún estoy trabajando", pero destaca que "lo que priman son los personajes". "De las novelas hay que hablar cuando son una realidad", advierte el exitoso autor, que este año se convirtió además en miembro de la Real Academia Galega y que acaba de publicar también con Kalandraka la obra solidaria "Milú".

De este modo, adelanta que la novela se sitúa en las últimas décadas del siglo XX, "en concreto entre los años 60 y 80, en los que se vivió el tránsito del contrabando al narcotráfico y muchas instituciones de Galicia estuvieron a punto de caer en manos de los mafiosos", apunta.

"Todo é silencio" narra el ascenso social de Mariscal, un capo contrabandista, y de las almas que habitan Brétema –una villa inventada con referencias reales de la costa atlántica– y que él domina a su antojo.

Pero, más allá de este "telón de fondo" la novela se centra en la vida de un grupo de amigos a los que une desde la infancia el andar por la playa a la búsqueda de restos de naufragios en el escenario siempre sorprendente del mar de Galicia. "Son personajes de distintas generaciones que, viviendo circunstancias parecidas, escogen caminos muy distintos; hay amigos que se terminan enfrentando y enemigos que finalmente llegan a un encuentro", comenta el autor, que insiste en que "lo que más me interesa en una novela son siempre los personajes y las relaciones entre las personas en todos los sentidos".

"No pretendo hacer una novela documental sobre el narcotráfico ni una obra histórica; se trata de ficción aunque, como decía Virginia Wolf, una ficción que como una tela de araña, está prendida en todos sus extremos a la realidad", describe el autor de "Qué me queres, amor" y buen conocedor de la época que trata en esta novela.

Rivas ubica la obra en el género criminal "mejor que novela negra", "un género con mucha fuerza porque acentúa, como un escáner de la sociedad, el lado más oscuro y oculto de ésta". Lo que atrae a Manuel Rivas de los círculos del crimen es "cómo rodean y corrompen, no siempre con éxito, la condición humana".

La novela, de 220 páginas, será publicada el próximo otoño dentro de Xerais Narrativa y la portada, que ayer adelantó la editorial, ha sido realizada por el dibujante y diseñador Miguelanxo Prado.