Tras desvelar la primera placa de "Patrimonio Europeo" que se coloca en Francia, a la entrada de esta Abadía situada en el centro de Francia, Donnedieu de Vabres dijo "ser consciente de vivir un verdadero acontecimiento", que marcará un hito "en la historia, a menudo magnífica, y a veces difícil, de la construcción europea".

El sello, ilustrado con un puente estilizado y una estrella europea sobre fondo azul, fue creado para resaltar el valor de "los lugares esenciales de nuestra historia y de nuestra cultura común" y hacer comprender al público más amplio "la sustancia del espíritu europeo, una especie de espíritu de familia", subrayó el ministro.

Destacó, asimismo, el hecho de que el primer "Patrimonio Europeo" francés fuese para la Abadía de Cluny, "lugar particularmente propicio para ilustrar" el diálogo europeo, el "enriquecimiento cultural recíproco que constituye nuestro primer objetivo".

La Abadía, creada por una donación del duque de Aquitania Guillermo I, el 11 de septiembre del año 910, a doce monjes benedictinos, "es una encarnación excepcional de la civilización latina" y un "momento fundador en la constitución del humanismo europeo", agregó el ministro.

Incluso mermado por las destrucciones sufridas, "este sitio excepcional", encrucijada de la civilización latina durante varios siglos, centro de investigación, de saber y reflexión, porta "una parte sustancial de la identidad europea, de sus raíces y diría incluso que de su esencia", consideró Donnedieu de Vabres.

La idea de crear el sello "Patrimonio Europeo" fue lanzada en mayo de 2005, en París, por los Gobiernos de Francia, España y Hungría, en los Encuentros para la Europa de la Cultura, y recibió pronto el apoyo de la Comisión Europea y de otros países miembros.

Inspirado en el modelo del Patrimonio Mundial de la UNESCO, el sello "Patrimonio Europeo" tiene por primer objetivo el de resaltar la dimensión europea de los bienes culturales, monumentos, sitios naturales o urbanos y lugares de memoria, testigos de la historia y de la herencia europea.

Concierne tanto el patrimonio contemporáneo como el inmaterial y aspira a reforzar el sentimiento de adhesión de los ciudadanos europeos a una identidad europea, así como a favorecer su sensación de pertenecer a un espacio cultural común.

En Francia, el sello será colocado próximamente en el Palacio de los Papas de Aviñón (sureste) y en la casa del "promotor de Europa Robert Schuman", en Scy-Chazeelle (norte), mientras que la Acrópolis de Atenas se convertirá oficialmente en "Patrimonio Europeo" el próximo día 26.

En España, también hoy, en un acto presidido por la ministra de Cultura, Carmen Calvo, recibieron el sello de "Patrimonio Europeo" el Archivo de la Corona de Aragón, el Real Monasterio de Yuste, el faro de Finisterre y la Residencia de Estudiantes de Madrid.