El ministro de Educación y Cultura, José Ignacio Wert,pidió ayer a las familias y a los docentes que afronten la educación de los hijos con una "nueva actitud" y que se "impliquen más" en esta tarea para hacerles ver la importancia que tiene una buena formación para su futuro.

Wert hizo esta consideración en un discurso que pronunció durante la inauguración de la Casa del Lector, un espacio dedicado al mundo del libro y la lectura, en un acto que ha contado con la presencia de los príncipes de Asturias.

El titular de Educación hizo hincapié en que para hacer frente al problema del abandono escolar es necesario que "familias, docentes y la sociedad en general" se impliquen más en la educación de niños y jóvenes, y ello mediante lo que Wert definió como una "nueva actitud".

Se trata, añadió el ministro, de hacerles ver la importancia que tienen los años de su formación para garantizarse su futuro y su inserción en la sociedad. En este sentido, añadió profesores y padres tienen que asumir "con decisión" el trasladar a los niños y jóvenes la idea de que en sus años de formación "están labrando sus posibilidades de éxito vital y profesional" y que su "esfuerzo y perseverancia en el estudio van a ser los determinantes principales de su buena inserción en la sociedad".

Wert advirtió de que "la profunda transformación" que necesita la educación española para alcanzar mejores resultados, especialmente en términos de abandono escolar y empleabilidad, "trasciende por supuesto al mero cambio legislativo". Asimismo, recordó las palabras del profesor de Stanford y economista Eric Hanushek, que decía que "en realidad, no es que un gobierno invierta más en educación y así tenga mejores alumnos y luego trabajadores más productivos, sino que si se mejora el rendimiento --sobre todo en matemáticas, lectura y escritura-- de los estudiantes, ese país aumentará su crecimiento económico, lo que es crucial porque permite recortar inversión en educación y al mismo tiempo que mejore el rendimiento de los estudiantes". Pero además, advirtió de que una mayor inversión por parte de los poderes públicos en educación no es sinónimo de mejoría en los resultados académicos.

De esta manera, aseguró que no porque un Gobierno invierta más en educación tendrá "mejores alumnos y trabajadores más productivos"; más, bien, apuntó, "si se mejora el rendimiento en matemáticas, lectura y escritura", el país logrará aumentar su productividad. Así, José Ignacio Wert consideró "crucial" esta reflexión porque demuestra que se puede recortar. En esta línea, puso como ejemplo el sistema educativo de Finlandia, que explicó, se sustenta en tres pilares fundamentales, que son la familia, la escuela y los recursos, obteniendo buenos resultados en el nivel formativo de los niños.

En su alocución, el ministro hizo una gran defensa del valor de la lectura cono herramienta indispensable para la educación, considerándola el "pilar esencial del sistema educativo" y ha asegurado que la reforma educativa persigue garantizar su pleno dominio por parte de los alumnos.