La gente mayor de 60 años representa entre un 18 y un 23 por ciento del total de la ciudadanía europea. Esta tendencia es mucho más exagerada en España, donde se calcula que para mediados de siglo la población mayor de 60 años sea un 20 por ciento del total.

El proceso de envejecimiento conlleva un descenso de los niveles de habilidad funcional y, como consecuencia, un decrecimiento en las capacidades físicas. Este proceso se ve agravado con la reducción de la práctica de la actividad física en los mayores, lo que produce a su vez un aumento de las dificultades para llevar a cabo las tareas cotidianas.

Los efectos del envejecimiento se dejan notar en el aparato locomotor, el sistema cardiovascular, el sistema respiratorio, el sistema nervioso, el sistema sensorial y el sistema digestivo. Las consecuencias del paso de los años se pueden dulcificar gracias a la práctica de ejercicios diseñados para estas edades. Existen centros deportivos en Oviedo que cuentan con un amplio programa de gerontogimnasia para no perder las capacidades físicas de las personas mayores.

Lo primero que se realiza es una evaluación médica para poder establecer las restricciones pertinentes sobre las actividades que se van a realizar. Posteriormente, se realizará una batería de tests con el objeto de evaluar los parámetros físicos asociados a la capacidad funcional. Y para finalizar se llevará a cabo una evaluación con preguntas personales para determinar cuál es el ejercicio que se realiza a diario.

La prescripción del ejercicio que se va a realizar lo determinan los siguientes factores:

1. Frecuencia: dos a tres sesiones semanales.

2. Duración: más o menos una hora.

3. Intensidad: dependiendo del caso de cada persona.

4.Tipo de actividades: las más adecuadas son aquellas de bajo impacto en las que se usen grandes grupos musculares, tales como la marcha, el jogging, las actividades en el agua, la danza, el ciclismo y los ejercicios calisténicos.

Una de las labores más arduas que tienen que realizar los profesionales especializados en esta ratio de edad es la motivación. La constancia es el mejor amigo de los resultados en estos casos, por lo que la evolución es lenta, pero segura y, sobre todo, necesaria.

Algo que tienen que tener en cuenta todos los usuarios a la hora de realizar deporte. Otro de los puntos que se tocan a la hora de realizar deporte es la mejora cognitiva y social de las personas que lo hacen. El monitor les ayuda a mejorar la memoria y a relacionarse con el resto de sus compañeros.

Todo tipo de personas que quieran realizar deporte podrán hacerlo, aunque se encuentren en silla de ruedas. Los ejercicios se adaptarán a cada uno de ellos. Aquellos familiares que estén interesados en llevar a sus padres o abuelos a este tipo de actividades no deben dudar en informarse y, sobre todo, hay animarles a que lo hagan.