Publicada en 1915, y considerada una de las grandes novelas del siglo XX, El buen soldado aplica de manera revolucionaria y magistral la narración en primera persona y los flashbacks cronológicamente desordenados. Ambientada en la época inmediatamente anterior a la Primera Guerra Mundial, en la trama se abordan el declive y la disolución de dos matrimonios amigos aparentemente perfectos -los Dowell y los Ashburnham-, tienen cabida muchas cosas y todas ellas convulsas y excesivas: ruina, mentiras, amor adúltero, escándalo, suicidio y locura.