La sección segunda del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) acogerá este martes la vista de apelación contra la sentencia que condenó a 18 años y medio de cárcel a Marcos Vidal González, que asesinó a Manuel Rivas, el marido de la mujer con la que había tenido una "relación intermitente".

El crimen ocurrió en noviembre de 2015 en Ponte Caldelas y el autor de los hechos fue juzgado por un tribunal de jurado en la Audiencia de Pontevedra. Tras el veredicto de culpabilidad, fue condenado a 18 años y medio por un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento. En la sentencia, se consideró probado que el acusado acudió al domicilio de la víctima y que, cuando supo que seguía viviendo con su esposa, lo inmovilizó con la rodilla, "lo tiró al suelo y le asestó diversas puñaladas en distintas partes del cuerpo" con una navaja, lo que le ocasionó la muerte.

El ataque fue "sorpresivo e inesperado", por lo que el fallecido careció de oportunidad para su defensa. Además, según la resolución de condena el acusado le propinó a su víctima más puñaladas de las necesarias para causar más dolor, aunque se tuvieron en cuenta las circunstancias atenuantes de confesión y dilaciones indebidas. Además de la pena de prisión, Marcos V. fue condenado a indemnizar a los padres de la víctima en 40.000 euros, y a su viuda en 30.000 euros. También se le impuso la prohición de acercarse o comunicarse con la esposa del fallecido, así como la medida de libertad vigilada durante 8 años una vez que salga de la cárcel.