Los vecinos en las calles Igrexa y Augusto González Besada, en Ponte Caldelas, muestran su preocupación y malestar por la presencia de vehículos que circulan a gran velocidad durante las noches de los fines de semana llegando incluso a dejar las marcas de los neumáticos en la calzada.

Los residentes en ambas calles del centro urbano están alarmados por las graves consecuencias que se pueden producir a raíz de esta conducción temeraria.

A estas críticas se sumó ayer el Partido Popular, a través de su portavoz, Antón Xil, quien trasladó esta preocupación tanto al Concello de Ponte Caldelas como a la Guardia Civil con el fin de que se extreme la vigilancia durante las noches de los viernes y los sábados en esta zona con fines disuasorios de estas prácticas que se van repitiendo a lo largo de los últimos fines de semana y que están provocando la preocupación entre el vecindario.

Al mismo tiempo, el PP pide la "máxima colaboración ciudadana" con el Concello de Ponte Caldelas y con la Guardia Civil con el fin de poder identificar a los autores de estas prácticas incívicas y peligrosas para la seguridad viaria de los residentes en la zona con el fin de que puedan ser apercibidos o, en su caso, sancionados por su conducta.

Finalmente, el Partido Popular recuerda la necesidad de reforzar la plantilla del cuartel de la Guardia Civil del municipio de Ponte Caldelas que "sigue sin tener cubiertos todos los efectivos que le corresponden y que deberían formar parte de su plantel habitual".