A pesar de que la asociación de vecinos O Chedeiro de Cerponzóns lo solicitó ya en octubre de 2018, no ha sido hasta los últimos días cuando el colectivo vecinal ha podido comprobar que la Xunta ha procedido a la reparación del sistema que alertaba a los vehículos pesados de que incumple el gálibo máximo permitido en el puente de Alba.

Los vecinos exigen la instalación de sistemas más eficaces que el actual, que consiste en unas cadenas con unas placas ubicadas a la altura máxima de 3,4 metros que es la que permite pasar de bajo del puente sin quedar encajonado. No obstante, se congratulan de que al menos se haya reparado este dispositivo, que permite a los camioneros saber antes de rebasar el puente que la altura del mismo no es suficiente para que el vehículo pueda pasar por debajo. Y es que durante los últimos dos años permaneció completamente inservible.

Esperan que con esta mejora se puedan evitar los continuos accidentes bajo este viaducto con camiones que quedan constantemente encajonados.