Un centenar de trabajadores de Urgencias se concentró ayer a las puertas del servicio en el Hospital Montecelo para reclamar un incremento de personal y una reorganización de la unidad que permita "superar la situación de precariedad", señalan desde la plantilla. Ésta se anticipa a los previsibles nuevos colapsos tras activarse el plan de contingencia de la gripe.

En la protesta tomaron parte profesionales de Urgencias, así como de otras unidades del hospital, ex trabajadores del servicio y representantes de colectivos como Enfermeras en Loita y los sindicatos. Todos ellos reclamaron mejoras en la dotación de personal, material y una nueva gestión de los ingresos.

Los trabajadores denuncian que "no se trata de una situación nueva en estos momentos sino que se arrastra desde hace años", de modo que se suceden los colapsos en distintos momentos del año, por ejemplo en invierno asociados a las epidemias de gripe o en verano con el incremento de población.

"En general el problema es diario, de años, al menos viene ocurriendo en la última década", indican desde la plantilla. Ésta reclama "un aumento del personal" de al menos una enfermera, un auxiliar y un celador por turno, a fin de equiparar en dotación el personal de enfermería al del médico. "Así podrían trabajar por equipos y redistribuir el trabajo de otra manera, lo que permitiría reorganizarse y atender al paciente de otra manera", explican los trabajadores.

La segunda reivindicación es que los pacientes que deban permanecer ingresados tras ser atendidos no estén obligados a permanecer en el servicio Urgencias, sino "que se les asigne un espacio, que se les suba a la planta a la mayor brevedad".

Y es que enfermeras y médicos denuncian que los pacientes "están horas, no 5 ni 3, sino 6, 8 o 14 horas esperando en Urgencias, consumiendo recursos por espacio físico y también recursos de personal", dado que estas personas han de ser atendidas a mayores de las urgencias, bien porque necesitan tratamiento, aseo o comer, en general los cuidados que precisa un hospitalizado.

Alrededor de una decena de profesionales trabaja por turno en el servicio de urgencias, una cifra que los profesionales consideran exigua en el espacio horario de menor actividad, generalmente de mañana, pero totalmente insuficiente a medida que avanza el día, ya que a media mañana sube el nivel de demanda, que se incrementa aún más durante la tarde-noche.

En estos dos últimos turnos las dotaciones son "muy insuficientes", denuncian los trabajadores, que atienden a una población potencial de más de 200.000 personas, residentes en los municipios del área sanitaria de Pontevedra.

Subrayan que "se habla de contratar refuerzos en picos de actividad, es verdad que n ocasiones se hace pero se espera mucho para ello y cuando llega ya está instalado el caos". En cualquier caso, añade, lo relevante es "dimensionar bien la plantilla para la actividad de todo el año; el problema está en la actividad cotidiana y los picos solo empeoran ese problema ya existente, el aumento de la plantilla tiene que ser definitivo y no en momentos puntuales".

Se trata de episodios de actividad intensa como los que se registraron ayer en el Hospital Provincial, como resultado de que algunos centros de salud de la comarca, caso del de Anafáns, en Poio, no se cubran las bajas al 100%.

Así, los pacientes, en este caso pediátricos, fueron derivados a Urgencias del Provincial, reservadas para niños y casos obstétricos. El personal de este servicio compartía la protesta con sus compañeros de Montecelo por este tipo de errores en la gestión y recortes en las suplencias.