La Sección Cuarta de la Audiencia provincial de Pontevedra ha dejado visto para sentencia un juicio por un caso de delito continuado de abuso sexual sobre una menor de 10 años en el que el acusado se ha declarado inocente. La defensa ha pedido la libre absolución para el procesado, mientras que la Fiscalía exige cuatro años y tres meses de prisión para el acusado de abusar de forma continuada de una menor, hija de un primo de su mujer.

En su declaración durante la vista oral el hombre ha asegurado que la relación con la niña era "normal" y que desconocía a qué se debían las acusaciones. El abogado de la defensa reclama la absolución del imputado al incidir en el perfil "fabulador" y "absorbente" de la niña, y ha negado la verosimilitud de su relato apoyándose en las declaraciones de los testigos durante la vista, entre los que se encontraba la madrina de la menor, que ha declarado que su marido nunca se había quedado solo con ella en su domicilio.

Por su parte, la representante del Ministerio Fiscal basa su petición en el testimonio de la menor y en el informe pericial de las técnicas del Instituto de Medicina Legal de Galicia que, según indicaron en la vista, afirmaron que el relato de los hechos es "consistente e inalterable". La fiscal indicó que no se observa móvil de resentimiento o de venganza ni motivo espurio para que la menor mantenga un testimonio incierto contra el acusado.

Según el relato de los hechos que hace la Fiscalía en su escrito de acusación, la niña solía acudir los fines de semana al domicilio de una prima del padre que estaba casada con el acusado. La fiscal mantiene que, sin que sea posible establecer con precisión las fechas, "en múltiples ocasiones" el acusado, "movido por la intención de satisfacer sus deseos sexuales y sirviéndose de la confianza derivada de la relación familiar", aprovechaba el momento de acostar a la menor para tumbarse junto a ella y efectuarle tocamientos por encima de la ropa. Al menos en una ocasión, cogió la mano de la niña y la llevó hasta su pene utilizándola para masturbarse, ha señalado.

Según la acusación del Ministerio Público, estas situaciones se repitieron hasta que la niña cumplió los diez años y se decidió a contar lo ocurrido a su abuela.

Además de una petición de pena de cuatro años y tres meses de prisión, la Fiscalía también solicita al tribunal que imponga al acusado la prohibición de aproximarse a menos de doscientos metros de la menor, de su domicilio, centro de estudios o cualquiera en el que se encuentre, así como la prohibición de comunicarse con ella por un periodo de seis años.

También demanda que se imponga al acusado la medida de seguridad de libertad vigilada por un periodo de un año, que se cumpliría después de la pena. Como indemnización, reclama que el acusado abone a la menor, a través de su legal representante, la cantidad de 10.000 euros.