Cayó el Pontevedra ante la Ponferradina en el El Tollarín. Tras una buena primera parte, los granates se vinieron abajo tras el descanso en el que pecó de falta de intensidad, que aprovecharon los locales imponerse en el juego y en el marcador.

El encuentro empezó con muchas alternancias entre los dos equipos. Luismi sorprendía con un un once con Romay como falso nueve, con Arruabarrena y Javi Pazos partiendo desde el banquillo, en una clara apuesta por llevar el peso del partido en el medio del campo. El Pontevedra tenía la posesión del balón ante una Ponferradina que apostaba por un fútbol más directo.

La primera ocasión de gol llegaría en el minuto 10 cuando Pedro Vázquez recibe un balón en corto en un corto tras un saque de córner de Romay y coracolea en el área rival pegado a la línea de fondo para dejar atrás a dos rivales y centrar. El balón se pasea por delante de la línea de gol, pero no encuentra rematador. La reacción llegaba cinco minutos después cuando en Isi recibía un rechace de una falta en la media luna y trataba de sorprender de lejos a un Edu que se había adelantado unos metros, pero el balón se iría alto por muy poco.

De nuevo en el minuto 26 Kevin deja atrás a un rival en la banda izquierda y centra un balón que de nuevo se pasea por delante de la línea de gol sin que Bustos pueda llegar y Romay tira forzado. El partido llegaba al descanso con la sensación de que los locales llegaban fácil al área de Edu, pero en situaciones mucho menos claras que las que disponía el Pontevedra.

Tras la reanudación el partido mutó. La Ponferradina salió con más intensidad, dio un paso adelante y le robó el dominio del balón y la superioridad en el medio del campo al Pontevedra, que tuvo que retroceder líneas y estuvo más contemplativo. Con los locales dominando, los granates pierden un balón en el medio del campo en la banda y el balón llega a Isi que regatea a dos jugadores granates y se la cruza a Edu para hacer el 1-0 en el minuto 56.

El gol dejó tocado al Pontevedra ante una Ponferradina que se venía arriba más por intensidad que por juego. Los granates tan solo intimidaron a los locales en el minuto 60 con un tiro a bocajarro de Pedro Vázquez que desviaba Gianfranco. Con los peores minutos para los granates, Luismi sacó a toda la artillería y dio entrada a Álex González, Arruabarrena y Javi López.

Con el Pontevedra volcado en ataque pero sin ocasiones claras, los locales conseguían resistir a las embestidas de los de Luismi Areda recurriendo a la intensidad defensiva y a romper el ritmo de juego con faltas. El resultado aleja al Pontevedra de los puestos de play off.