La carretera N-550 es la vía interurbana que más muertes se cobró en 2018 en Pontevedra, según los datos del Observatorio Nacional de Seguridad Vial, con un total de 5 fallecidos, 3 heridos hospitalizados y otros 3 heridos leves.

La autopista AP-9 registró el pasado año 4 accidentes mortales, con otros tantos fallecidos, además de dos víctimas hospitalizadas y una leve.

Otras vías interurbanas clasificadas como "sin denominación" por la DGT registraron también un total de 4 accidentes mortales, con otros cinco fallecidos y un hospitalizado.

En este balance anual de la DGT se registran 10 víctimas mortales en las restantes vías interurbanas que atraviesan la comarca de Pontevedra.

Suman en el 2018 un total de 24 fallecidos en carreteras interurbanas, 8 heridos hospitalizados y 11 heridos leves.

La subdelegada del Gobierno, Maica Larriba, reconoce que no son unos buenos datos de siniestralidad en la vias de la provincia ya que desde mitad de año se concentran la mayor parte de las victimas mortales. Pero destaca que cerca del 20 por ciento de los accidentes tienen una característica y es la ausencia del cinturón de seguridad. Además las distracciones al volante es otra de las causas habituales de los siniestros.

Por ello, Larriba vuelve a instar a la concienciación de las personas que se ponen al frente de un vehículo para que "extremen la atención y cómo llevo recordando desde que llegue al cargo, ninguna llamada o mensaje es más importante que la vida".

La subdelegada anunció que la intensificación de los controles va a ser importante a lo largo de 2019 y que espera que la reducción de la velocidad en las vías convencionales de 100 a 90 kilómetros por hora se refleje en una reducción de los accidentes.