El Concello de Ponte Caldelas diseña su primero parque forestal después de haber concurrido a las subvenciones para este fin convocadas por la Diputación. El equipo municipal trabaja en la planificación de una superficie 64 hectáreas que se reparte por el valle del río San Vicenzo, a lo largo de los montes y los entornos de Paradela y Gradín y abarca también el área arqueológico de Tourón y el campo de Taboadelo.

El proyecto del Parque Forestal de Ponte Caldelas, con un presupuesto de 10.971,43 euros, de los que la Diputación subvenciona el 80%, permitirá crear un corredor ecológico, siguiendo el curso de este río, afluente del Verdugo, donde se identificaron un total de 26 especies de anfibios, reptiles, aves y mamíferos, varias de ellas amenazadas o recogidas en la directiva Habitat.

El parque está también concebido como un escudo contra el fuego y la elección de este enclave responde al Plan Marco de Gestión Integrada de la Mancomunidade de Montes de Ponte Caldelas, del año 2008, que ya contempla la vaguada de San Vicenzo como uno de los espacios mejor conservados del municipio.

Los terrenos incluidos pertenecen tanto a comunidades de montes como a propietarios particulares, con los que se negocia la tala de las invasoras, limpieza y venta conjunta de la madera antes de proceder a la revegetación con especies autóctonas.

El futuro parque forestal atesora también importantes valores culturales como el área arqueológico de Tourón, el castro de Tourón; así como abundantes elementos de etnografía popular como puentes, molinos, caminos empedrados, cruceros y arquitectura religiosa.

El gobierno local prevé el desbroce y señalización de un nuevo sendero de 10 kilómetros. En Gradín se actuaría en un área de 6 hectáreas y en el propio valle del San Vicenzo (33 hectáreas) se eliminarían las especies invasoras para sustituirlas por vegetación autóctona.

En Tourón (16 hectáreas) se prevé la eliminación de las acacias que hay en la zona próxima a la estación rupestre del Nabal de San Martiño. Finalmente, en Taboadelo (9 hectáreas) se quieren podar y rozar las masas de frondosas, tratar los castaños quemados en el monte Abelán y, finalmente, poner en valor a entorno de sus cruceros.

Se aspira a que sea declarado Espacio Natural de Interés Local ( ENIL) y se contempla la actuación directa sobre el castro da Cidade de Tourón, superando la dificultad de que se trata de una propiedad particular dividida en 63 fincas. Actualmente está invadido de eucaliptos que ardieron en los años 2006 y 2017, por lo que se propone su limpieza.