La empresa Ence asegura en un comunicado que el suministro de madera a las fábricas de Lourizán y Navia (Asturias) "se está desarrollando en la jornada de hoy con absoluta normalidad" pese al paro convocado por la Plataforma para la Defensa del Transporte de Madera.

Asegura que "la entrada de camiones con materia prima de forma regular en sus instalaciones".

Esta huelga, que según la compañía no tiene repercusión en Pontevedra, pretende entre otros objetivos que Ence permita de nuevo el acceso a sus instalaciones del camionero que en octubre pasado agredió con un martillo a dos ciclistas.

Por ello, Ence insiste en que "la única motivación de este paro es la defensa de un transportista que agredió de manera absolutamente incívica e injustificable con un martillo a unos ciclistas en la entrada de la biofábrica de Ence en Lourizán. La compañía considera que no es justificable de ningún modo este comportamiento, que rechaza firmemente".

La Plataforma para la Defensa del Transporte de Madera de Galicia y Asturias tiene convocado desde hoy un paro indefinido en el suministro "por las reclamaciones no atendidas por parte de la empresa en materia de seguridad laboral para los profesionales".

Sin embargo, de este paro se demarcaron otros colectivos de camioneros y suministradores, que representan la mayor parte del material que recibe la planta de Lourizán, por lo que la llegada de madera no se ha visto interrumpida.

En un reciente comunicado, Ence respondía a la convocatoria del paro diciendo que "su única motivación es la defensa de un transportista que agredió de manera absolutamente incívica e injustificable a unos ciclistas en la entrada de la biofábrica de Lourizán", un incidente registrado en octubre pasado cuando un camionero golpeó con un martillo a dos ciclistas que le recriminaron un adelantamiento en la PO-546. Ence decidió entonces prohibir el acceso del transportista a sus instalaciones.

Por ello, la empresa "se reafirma en no se puede justificar de ningún modo este comportamiento, que rechaza firmemente" y remarca que "se trata de una persona reincidente, que ya agredió a un empleado de Ence en 2015 y estuvo por ello sancionado un mes". "La empresa no contrató directamente los servicios de dicho transportista ni impide que trabaje para otras empresas", añade.

Entre otras demandas, la Plataforma reclama "la eliminación de la restricción de entrada" a las instalaciones de este profesional, medida que consideran "arbitrarias y abusivas".

Pero la empresa se mantiene en su postura y subraya que "es de la máxima importancia que su actividad empresarial no perjudique ni suponga riesgo para los aficionados al ciclismo, por lo que exige que todos los transportistas que colaboren con la empresa respeten estrictamente las normas de circulación y muestren una máxima atención a los ciclistas".

Añade que "la seguridad de las personas, tanto empleados como colaboradores, así como de sus instalaciones constituye una prioridad en su gestión, lo que por supuesto se aplica a las instalaciones de entrega de mercancía, que son totalmente seguras".