Los vecinos de Lourizán que integran la plataforma contra la ampliación de la depuradora de Placeres han mostrado su malestar con el Servicio Provincial de Costas tras recibir una notificación en la que se ordena la retirada de las cruces instalados en los terrenos del antiguo campo de fútbol. Se trata de una parcela marítimo-terrestre que ocupan los vecinos, que disponen de quince días para retirar las cruces "bajo amenaza de sanciones".

La plataforma también denuncia que "en una reciente reunión con el jefe provincial, nos informó de que si la ampliación de la planta cumple todos los requisitos, podría tener luz verde por parte de Costas". Por ello, lamentan que "para Costas unas cruces, de mínimo impacto y efímeras, sean un gran problema y un menoscabo para el Dominio Público Marítimo-Terrestre, pero un mamotreto de hormigón sí tendría sus bendiciones".